Autor:
ShaniShaktiAnanda
El
hecho de ser espiritual no se lleva a criterio personal, todo está
escrito. Los lineamientos de vida, las formas de actuar y de ver las
situaciones, ya están muy claras y solo hay que entenderlas y
llevarlas al momento actual y a la situación particular que deseas
enfrentar espiritualmente. Uno de esos textos donde se dan muchas de
esas instrucciones es precisamente el Guru Bhakti Yoga.
Para
toda persona que se diga o pretenda ser espiritual, las enseñanzas
presentadas en el Guru Bhakti Yoga (GBY) son básicas.
Pero
siempre nos enfrentamos al mismo problema a la hora de leer una
enseñanza sagrada. Al no tener el contexto suficiente se corre el
peligro de hacer interpretaciones a medias y perder el verdadero
sentido de la enseñanza. Y peor que esto es pensar que se ha
entendido la enseñanza y actuar en consecuencia, a partir de esas
interpretaciones tergiversadas o incompletas.
Hoy,
uno de mis discípulos trajo a reflexión el siguiente fragmento del
GBY y quiero exponer parte de la enseñanza.
GBY:
Cap. III #30:
Sé
cuidadoso en la selección de tus compañías. Las
personas indeseables sacuden fácilmente tu fe y tu
creencia. Ten absoluta fe en tu Maestro Espiritual al que estás
dedicado. Nunca permitas que cambien tus convicciones. Continúa tu
Sadhana (“práctica o ejercicio espiritual”) con fervor y
entusiasmo. Tendrás un rápido progreso ascendiendo por la escalera
espiritual peldaño a peldaño y, finalmente, alcanzarás la meta.
Este
fragmento del GBY no es difícil de entender. Aquí simplemente se
plantea el peligro de desviarse del estado o del camino
espiritual (según se pretenda vivir o crecer
espiritualmente) que lleva a la meta de mantenernos o ser cada vez
más espirituales.
Específicamente
se indica el peligro de acompañarse en este recorrer de la vida
por personas que no apoyen o compartan tu intención espiritual; y
que incluso puedan llegar a invalidar, desviar o torpedear tu
esfuerzo por Dios.
La
enseñanza es así de sencilla; y se soporta por el dicho popular:
“dime con quien andas y te dirá quien eres”. Si “andamos”
con personas no correctamente espirituales, pues será difícil para
nosotros ser espirituales.
El
problema de esta enseñanza se plantea a la hora de reconocer a esas
“personas indeseables”; indeseables como compañía, en un
estilo de vida donde lo espiritual debe ser protagónico.
Uno
de los inconvenientes que siempre apunto es el de leer o interpretar
una escritura o una enseñanza sagrada con criterios humanos y no con
criterios espirituales.
Cuando
se habla de “personas indeseables” no es suficiente identificar a
persona con comportamientos o actitudes humanamente indeseables,
sino que se debe ampliar el contexto y llegar a comportamientos
o actitudes no cónsonos con lo espiritual
(aunque pueda ser muy humanas).
Es
bien sabido que somos seres espirituales, además de seres humanos (o
terrenales) y nuestro comportamiento o actitudes de vida siempre se
enmarcan en ambos aspectos: humano y espiritual.
Si
no estamos claros de estas partes de nuestro Ser, muchas veces una
persona puede ser “muy buen ser humano” pero estar dejando de
lado comportamientos y actitudes espirituales, haciéndola una
“persona indeseable espiritualmente”.
Para
una persona con la parte humana como única visión, una persona
“indeseablemente espiritual” puede ser incluso aquellas que
calificamos de tierna, sensible, amiga, comprensiva, dedicada, fiel,
luchadora, esforzada, “buena nota”, “buena vibra”, “buena
gente”, etc.; ya que todos estos son apelativos humanos, no
espirituales.
El
problema con esta gran verdad dicha en el GBY es que muchos no saben
distinguir a las personas indeseables, descritas desde el ámbito
espiritual; y muchos conocidos, amigos entrañables y hasta familia,
pueden llegar a ser aquellos que desvíen a una persona espiritual
del estado o del camino correcto.
La
mala noticia es que para ganar ese discernimiento de quien es
“deseablemente espiritual” se debe tener un contexto muy amplio
de la espiritualidad; por lo tanto, no se puede dar un listado
completo en este artículo de cómo diferenciarlas.
Esta
es la razón por la cual en el mismo texto del GBY se exhorta a
tener absoluta fe en tu Maestro Espiritual, ya que posiblemente
él sí tenga un criterio mayor para darte algunas características o
simplemente para advertirte de algo o alguien que no está actuando
espiritualmente.
Pero
podemos dar una definición muy simple de lo que es una persona
espiritual:
“Una
persona espiritual es aquella que mide cada una de sus acciones,
pensamientos, sentimientos, deseos y preferencias, no según sus
criterios o ganas personales, sino según los lineamientos dados por
Dios. Claro está, suponiendo que esa persona esté muy clara en
cuáles son los lineamientos de Dios y se esfuerce en vivir según
ellos; a veces a pesar de su propia incomodidad humana.” SSA
A
pesar de que el concepto anterior puede ser claro, aún tiene mucha
tela que cortar. Incluso los lineamientos dados por Dios deben ser
entendidos no por una mente humana, sino a través del discernimiento
espiritual.
No
puedo abarcar más. Si esto te pareció interesante, busca
involucrarte en un escenario de crecimiento espiritual, donde la meta
sea comportarse como Dios espera que lo hagas, a pesar de ti mismo. Y
allí intenta no acompañarte mucho de “personas indeseables”.
Dios
te bendiga.
Namasté.
ShaniShaktiAnanda
Original:
1123 AS. (28 de enero del 2019)http://www.shanishaktiananda.org
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Palabras-claves:
Guru Bhakti Yoga, GBY, Maestro Espiritual, personas indeseables