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jueves, 11 de mayo de 2017

Lo divino, lo adorable

Autor: ShaniShaktiAnanda

Dios es todo, Dios está en todo y Dios está en nosotros; lo único que necesitamos es manifestar ese espíritu de Dios en cada instante y en cada situación de nuestra realidad.

Por lo tanto, quedarnos con la frase hecha de que “Dios está en mí y yo estoy con Dios” no sirve de nada. No sirve de nada porque no tiene nada de especial.

Lo especial sería poder decir “cuánto de Dios yo veo en el mundo que me rodea y en mi prójimo; y cuánto puedo yo someter mi personalidad en función de vivir la vida como Dios lo espera de mí.” Esto sí es sobresaliente. Pero por supuesto, antes de responder o decirlo, hay que saber qué espera Dios de mi.

Pues Dios espera muchas cosas de cada uno de nosotros; y todas están en función de cómo comportarnos y de cómo asumir nuestras situaciones de vida. Cada religión plantea las mismas cosas pero desde diferentes momentos históricos y en diferentes escenarios culturales.

Pero siempre, en cada una, lo que Dios espera de nosotros se puede resumir en tres grandes lineamientos:

  1. Preferir, honrar o buscar de primero el bienestar espiritual eterno antes que las temporales comodidades humanas/terrenales. Enfocar nuestro esfuerzo y nuestras intenciones de vida hacia Dios. (“Amar a Dios sobre todas las cosas” - Mateo 22:37).
  2. Cuidar que tus actuaciones no dañen a tu prójimo de forma que lo aparten de la oportunidad de llegar al Cielo (“Amar a tu prójimo como a ti mismo” - Mateo 22:39)
  3. Mantener el corazón limpio, sin sentimientos impuros, por nadie ni por nada (“Ama a los que consideres tus enemigos” - Mateo 5:44)

Estos tres grandes lineamientos son la base desde donde se desprenden todos los otros preceptos que debe seguir una persona que se quiera decir espiritual, y estar en gracia con Dios.

Una vida llevada de esta forma, asegura los pasos hacia el Cielo, hacia el Paraíso, a la Resurrección, al Nirvana, al Moksha, o ese estado máximo eterno y divino como quiera que lo llamen.


No es de nadie; por lo tanto, es de todos.

Pero como los lineamientos básicos de vida para cumplir la meta máxima de llegar a Dios están en todas las prácticas verdaderamente religiosas, el proceso para llevar al Cielo no pertenece a una sola religión ni institución.

Muchas iglesias, como instituciones humanas, se han querido apoderar de este proceso de llegar a Dios como algo muy de ellas. Y muchas veces este intento de dominar se ha hecho desprestigiando a otras religiones incluso más antiguas que ellas mismas.
Humanamente una forma de estar más en alto que los demás es pisando a los otros.

Decir que una religión tiene los derechos de autor de cómo llegar al Cielo, quiere decir que antes de que existiera esa religión, ningún ser ni en el planeta ni en el universo, pudo haberlo hecho. Esto realmente es un protagonismo absurdo.

Por el contrario, decir que algunas religiones están mejores adaptadas a los tiempos y a ciertas culturas que otras, para que los individuos puedan llegar al Padre, pues sí es mucho más aceptable. Pero esto no desacredita a las demás.


¿Qué es lo Divino o lo Adorable?

En esta lucha de protagonismos, como parte de establecerse como “el único camino al Cielo”, estas instituciones se deben apoderar también de lo que se entiende como Divino o Adorable.

Pero en realidad ¿qué es lo Divino o lo Adorable? Planteo una única respuesta desde el punto de vista místico:

Si la única opción de llegar al Cielo (resucitar) es manifestando todo el Espíritu de Dios en nosotros; y eso se tiene que hacer enmarcados bajo los tres grandes lineamientos indicados anteriormente; pues Divino o adorable es aquello que te permite, que te anima o que te enseña a: amar y preferir a Dios sobre todas las cosas; amar a tu prójimo como a ti mismo; y amar a aquellos que sientas como enemigos.

¿Acaso puede haber algo más Divino o Adorable que aquel o aquello que impulsa a alguna persona a preferir su camino al Cielo antes que a su propio bienestar terrenal (sin descuidar este último)?

¿Acaso puede haber algo más Divino o Adorable que aquel o aquello que impulsa a alguna persona a no tener resentimientos hacia su prójimo, sin importar qué?

¿Acaso puede haber algo más Divino o Adorable que aquel o aquello que impulsa a alguna persona a mantener su corazón limpio sin importar la situación que esté pasado o sin importan la persona con la que esté tratando; desde el único entendido que todo son oportunidades para llegar a Padre?


Pero la lucha de muchas instituciones en ser las únicas, pasa por desprestigiar, satanizar o execrar a cualquier cosa Divina o Adorable que no esté en su poder.

¿O es que algunas deidades de otras religiones no pueden mover a algunas personas a comportarse como Dios espera?

¿O es que algunos Gurús o Maestro Espirituales no pueden mover a algunas personas a comportarse como Dios espera?

¿O es que acaso no hay miembros de iglesias que se dicen poseedoras de la verdad, que por el contrario plantean luchas y guerras contras sus propios hermanos?


Atención

En esto de buscar la forma de cómo complacer a Dios para que nos acoja en su Reino, no hay mucho protagonismo; diferentes “instancias correctas” pueden ayudar. Cuidado: nunca se puede hacer por cuenta propia.

Pero cuidado, no digo que cualquiera lo puede hacer, he dicho “instancias correctas”. Hay muchas prácticas que se dicen espirituales, que si bien pueden procurar algún tipo de beneficios, no son realmente espirituales.

Cualquier intento correcto de llegar a Dios debe estar marcado por una Divinidad que impulse a:

  1. Preferir utilizar nuestro esfuerzo vida para cumplir con lo que Dios espera de nosotros (antes que preferir buscar bienestar humano/terrenal)
  2. Amar a los demás (sin importar qué)
  3. Mantener el corazón sin sentimientos difíciles (aunque existan argumentos y razones humanas que justificarían tenerlo diferente)

Pero “por sus frutos les conoceréis” (Mateo 7:16). El resultado de este acercamiento a Dios por medio de esa “instancia divina”, debe producir un estado de paz cada vez mayor, sobre todo en las situaciones de vida más complicadas.

Hablo de “paz en los problemas”, no de tranquilidad como carencia de problemas.

Si algo “Divino y Adorable” no puede llegar a producir ese estado de paz en los problemas, eso, de divino y adorable no tiene mucho.

Ojalá esto sirva para alguien, en algún momento.

Namasté.
ShaniShaktiAnanda
Master Reiki Usui-Tibetano, Karuna Ki, Reiki Mineral
Original: 497AS. (11 de mayo del 2017)http://www.shanishaktiananda.com
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