Páginas

jueves, 20 de julio de 2017

La extrasensorialidad luego de una experiencia cercana a la muerte

Autor: ShaniShaktiAnanda

En este escrito deseo hacer referencia a dos fenómenos paranormales que se conocen, que se relacionan entre sí, pero que en algunos casos se llegan a malinterpretar.

Corresponde a enseñanza mística entre la unión de dos de nuestros tres planos de existencia: del Plano Terrenal/Mental con el Plano Astral. El plano que queda afuera es el Plano Espiritual.

Esto es un buen comienzo, porque al no estar involucrado el Plano Espiritual se puede entender desde el inicio que nada relacionado con estos fenómenos corresponde a un proceso espiritual. Lo paso a explicar en detalle.


La extrasensorialidad

La extrasensorialidad es una capacidad que tiene algunos seres vivos (limitémonos a los seres humanos) de percibir información que viene más allá de los cinco sentidos físicos. Se conoce también como Percepción Extrasensorial o PSE.

Nuestra realidad integral es mucho más grande y compleja que nuestra existencia material. Hay planos de consciencia y planos de existencia paralelos al plano terrenal, que no se pueden explicar ni percibir por parámetros físicos; por lo tanto, no son aceptados por la ciencia actual.

Pero que algo no se pueda explicar ni se pueda medir o verificar por el pensamiento científico del momento, nunca ha significado que no exista. Recordemos que por limitaciones del pensamiento humano, la Tierra antes era plana; esta era el centro del Sistema solar; un ser humano no podía viajar a más de 80 km/h porque moriría; y la existencia de las partículas subatómicas era tontería.

En esos otros planos de existencia, en particular en el Plano Astral, existen también estímulos e información que permanecen suscritos a dicho plano. Lo mismo pasa con los estímulos y la información que pertenecen al Plano Terrenal/Mental, estos se circunscriben a este plano.


El universo (y por tanto nosotros) existe paralelamente en estos tres planos de existencia: Plano Terrenal/Mental, Plano Astral y Plano Espiritual. Esta triple existencia pasa inadvertida para la mayoría de las personas, porque generalmente ellas viven con un predominio de Consciencia Mental. Esta Consciencia Mental que únicamente se alimenta del Plano Terrenal/Mental; por lo tanto, lo demás no existe para ella.

En estos tres planos de existencia, el Plano Astral es contiguo al Plano Terrenal/Mental, como vecinos; y por lo tanto tienen una frontera en común.

Esta frontera es lo que mantiene separados los estímulos de un plano hacia el otro; esto es lo sano y lo correcto. Si bien nuestra existencia es triple y una condiciona a la otra; cada una deben ser autónoma; debe trabajar con sus propios estímulos e información.

Con todo lo explicado, podemos comenzar a inferir cuál es el proceso de extrasensorialidad.

Cuando en la integralidad del Ser de un individuo esta barrera (entre el plano terrenal y el astral) no es muy sólida o tiene alguna fisura, la información de cada plano puede pasar al otro. Literalmente se cuela por la fisura.

Esta debilidad de la barrera o las mismas fisuras no deberían existir. Lo normal y lo sano es que cada plano se mantenga aislado. Las razones de esto no las voy a exponer aquí.

Existen tres causas generales para esta permeabilidad de la barrera terrenal/astral:

  1. por causa congénita (de nacimiento);
  2. por eventos puntuales o procesos naturales que deterioran la capacidad cognitiva o cerebral del individuo (por ejemplo en procesos degenerativos cerebrales, por ACV, o como parte del proceso de la muerte biológica);
  3. o por medios inducidos (por ejemplo drogas alucinógenas), que pudieran caer en la causa anterior.

Cada una de las tres causas requiere de una descripción y contextualización muy extensa; pero en este caso solo necesitamos referirnos a las causa congénita.


La extrasensorialidad desde el nacimiento.

Cuando se habla de la causa congénita de la extrasensorialidad, no me refiero a causas de nacimiento biológico ni de causas genéticas. La referencia de “nacimiento” se asocia al proceso de “reencarnación”.

Dentro de la correcta concepción de nuestro Ser Integral, además de cuerpos físicos/biológicos, somos también almas (además de espíritu). Y el punto real es que somos primero almas que cuerpo físico. El alma existe antes del nacimiento y es esta la que encarna en nuestro Plano Terrenal/Mental.

El alma existe en el Plano Astral; y el proceso la concepción y nacimiento es precisamente ir formando un cuerpo físico/biológico donde el alma (junto al espíritu) pueda habitar y así vivir su experiencia terrenal.

Esta integración entre el alma y el cuerpo, se da durante la concepción/nacimiento; y es allí cuando se forma precisamente esa barrera que debe separar las existencias astral y física. Si bien ambas partes estarán integradas, debe haber independencia de estímulos e información. Algo así como “estar juntos pero no revueltos”.

En algunas culturas esta barrena se conoce como “El Velo de Maya”

En algunos pocos casos, esta barrera no se forma completamente o queda con fisuras; no llegándose a realizarse una integración correcta entre el alma y el cuerpo (ambos se integran pero sin independencia de estímulos o información).

Es en estos casos, el individuo (niño) comienza a utilizar su Consciencia Mental (como es normal), pero se cuelan también estímulos o información desde el Plano Astral. Esto es la Extrasensorialidad congénita.

La sociedad moderna (nada espiritual pero sí muy mágica o fenomenológica) suele aplaudir estas capacidades extrasensoriales, considerando afortunadas a las personas que las poseen. Incluso algunas de estas personas se sienten bendecidas por Dios y con misiones de vida especiales, cuando la realidad es totalmente otra.
Una extrasensorialidad congénita debe ser abordada de forma acertada desde que el individuo es muy joven; porque a pesar de “disfrutar de capacidades que los demás no tienen”, la evolución del alma se puede ver en peligro.

La manera de cómo tratar la Extrasensorialidad congénita de forma acertada, también escapa de este artículo. Lo que puede decir es que no es negándola ni suprimiéndola. Si es del interés, las enseñanzas están a la orden, solo debes involucrarte.


Experiencia Cercanas a la Muerte

Las Experiencias Cercanas a la Muerte o ECM son también uno de esos fenómenos pocos comprendidos.

De forma contraria al momento de la concepción/nacimiento (cuando el alma se debe integrar al cuerpo físico/biológico); durante la muerte el alma debe separarse de ese sustrato físico/biológico que está dejando de funcionar. Esto (que se conoce como muerte) se realiza por fases.

En una de estas fases de des-integración del alma al cuerpo físico/biológico, la barrera que separa el Plano Astral del Plano Terrenal/Mental también desaparece. La barrera ya no se necesita porque el alma seguirá existiendo pero ya sin el sustrato terrenal.

Precisamente, el proceso de la muerte biológica termina cuando el alma se separa totalmente del Plano Terrenal.

Pero cuando ocurren las ECM, el proceso de la muerte no se cumple totalmente.

Si el proceso de muerte comienza a ocurrir y se van cumpliendo las fases (incluyendo la desaparición de la barrera), pero justo al final del proceso el cuerpo físico “revive” (sea por cualquier causa); el proceso de la muerte debe retroceder.

En un proceso de revivir, las fases de la muerte se revierten; y en esos casos se da un “nacimiento acelerado no programado

En las fases de ese “nacimiento acelerado no programado” muchas cosas pueden fallar (esto suele ser así porque no es un proceso natural, sino inducido). Y una de las cosas que suele fallar es la formación de la nueva barrera que separa el Plano Astral del Plano Físico/Terrenal.

Cuando el “individuo revivido” recobra el conocimiento, puede despertar con una Extransensorialidad que pudiera considerarse “congénita postmorten”.

El problema en estos casos es que esta extrasensorialidad aparece en un individuo ya adulto, con muchos condicionamientos mentales y por lo tanto con mayor dificultad de manejarla que si hubiera sido realmente de nacimiento.

Esta es la explicación real de esos casos de personas que volvieron de la muerte y comienzan a tener capacidades psíquicas especiales. En realidad no es algo por lo cual alegrarse, más allá de no haberse muerto.


Extrasensorialidad e Iluminación

Y este es un punto álgido; porque muchas veces se cree que una persona que presenta Extrasensorialidad por una ECM es una persona “que se iluminó”. Nada más equivocado.

Las capacidades extrasensoriales o paranormales nunca han significado desarrollo evolutivo ni altura espiritual.

Lo espiritual se refiere al Plano Espiritual; y que como vimos, la extrasensorialidad es la integración defectuosa de los dos planos inferiores al espiritual.

Esto que acabo de decir, con toda seguridad va a molestar a muchas personas que se sienten especiales por poseer capacidades extrasensoriales; pero al Cesar lo que es del Cesar y a Dios lo que es de Dios.

Una persona espiritual es aquella que vive su vida en función de los lineamientos (enseñanzas) que Dios ha dado muchas veces a lo lago de la historia y de la prehistoria de la humanidad; y en ninguna parte se nombran la capacidades extrasensoriales.

Una persona “Iluminada” es aquella que ha aprendido y ha llegado a vivir su experiencia terrenal con Dios como intención y como misión de vida; donde sus asuntos, deseos y necesidades personales ya no lo condicionan de ninguna manera. Una persona iluminada vive únicamente para cumplirle a Dios; esto es lo que la lleva al Cielo.

En esto tampoco aparecen las capacidades extrasensoriales.


Problemas con la extrasensorialidad

Pero no digo que la extrasensorialidad sea mala; sino que puede traer problemas si no se asume correctamente.

Uno de los problemas principales es creer que teniendo esas facultades ya se es un ser espiritual e iluminado. En el instante en que una persona se cree especial, bendecida o iluminada; en ese instante su alma detiene su camino hacia Dios. Y esto sí es grave.

A lo mejor no siente los efectos aquí en la tierra; pero cuando muera se dará cuenta del tiempo que vivió autoengañada. Yo soy de los que no quisiera estar en sus zapatos.

No niego que a lo mejor una cierta capacidad extrasensorial puede hacer más divertido el camino de crecimiento espiritual; pero es más probable que estorbe de lo que ayude.

Otro problema menor con la capacidad extrasensorial es que las personas que la poseen se vuelven “más apetecibles” por esos seres desencarnados que aún desean seguir viviendo. Esto, de por sí, trae sus inconvenientes obvios.


En fin, creo que es importante manejar estos conceptos para no malinterpretar lo que significa ser espiritual; y para no quedarse parados en el camino de regreso al Padre. En ocasiones podemos quedarnos distraídos en paisajes fantásticos y mágicos que no aportan mucho más que retardar el estado de paz eterna que todos merecemos, pero que tenemos que ganarnos con esfuerzo.

Dios te bendiga.

Namasté.
ShaniShaktiAnanda
Original: 567 AS. (20 de julio del 2017)http://www.shanishaktiananda.org
Twitters: @SanaCristica @eReiki @EvolConsc @pagr777
Palabras-claves: extrasensorial, paranormal, muerte, Dios, espíritu, alma, mente, terrenal, físico, paz, experiencia, cercana, PSE, ECM, percepción 

No hay comentarios:

Publicar un comentario