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martes, 12 de noviembre de 2013

La solución final



Autor: Pedro A. Gómez Ruzzo

Desde siempre se han escuchado a personas que algunos definen como locos, fanáticos, otros como profetas o iluminados, anunciando el fin del mundo. Y no me refiero a eventos cósmicos o fechas numerológicamente particulares; me refiero a aquellos que predican con la conocida frase “¡El tiempo se acaba, arrepiéntanse; el final está cerca!”.

Muchos de estos avisos sobre el final se basan en interpretaciones de escrituras antiguas (por ejemplo el Libro del Apocalipsis), pero como buenas profecías no están definidas temporalmente y están construidas con simbología difícil de contextualizar.

Pero ahora me toca a mí; y comenzaré argumentando y contextualizando un poco; enumerando los puntos para mayor comprensión.

  1. Los seres humanos estamos aquí en esta existencia (la que se acabaría en el nombrado “fin del mundo”) para una sola cosa; purificarnos a nivel espiritual. Estoy contextualizando, ya que el “fin del mundo” es un evento enmarcado dentro de enseñanzas espirituales.
  2. Cuando se habla de purificarnos nos referimos a: eliminar las deudas del karma (negativo) y acumular karma positivo. El karma se puede ver como “esa energía” que cultivamos con nuestras acciones y que terminan construyendo nuestras situaciones futuras (en esta vida o en las siguientes, dependiendo de lo que se crea). Acciones desafortunadas --> karma “negativo”--> situaciones futuras “difíciles”; Acciones armónicas --> karma “bueno”--> situaciones futuras “iluminadas”. A veces se conoce al karma “negativo” como “pecado”
  3. Las religiones (todas, aunque no lo acepten) y en general todas las enseñanzas espirituales reales, tienen como uno de sus objetivos enseñarnos a lidiar con el karma. Lo han hecho de diversas formas: desde enseñarnos comportamientos correctos y formas de enfrentar la vida, pasando por la adoración, rituales, mantras, etc. Pero cualquiera de estas formas de trabajar al karma únicamente funcionan desde una práctica seria y comprometida de alguna religión o enseñaza espiritual. Si no hay compromiso integral con la práctica, ninguno de estos procedimientos sirve para mucho.
  4. El karma, como energía, se genera cuando dos o más personas (seres) se interrelacionan; interrelación que puede ser directa o indirecta. Si esa interrelación es armónica se genera karma “bueno” y todos los involucrados lo comparten. Si en cambio la interrelación entre dos o más personas genera malestar en alguna de ellas, se genera karma “negativo” y TODAS lo comparte; sin importar quién “empezó” o de quien fue la culpa.
  5. De aquí la importancia de vivir bajo normas y preceptos religiosos/espirituales: con ellas se manejan las relaciones interpersonales correctamente; se trabaja el karma que llevamos arrastrando y se genera nuevo karma “bueno” para construir situaciones futuras mejores. Esto es así tanto en parejas como en pequeños grupos de amigos, en familias o en la sociedad.
  6. Cuando se proclama que “viene el fin del mundo”, el mundo se refiere a sociedades, países; y aquí me voy a centrar.
  7. En toda situación personal de vida, el karma es una de las energías que está definiendo su calidad. Toda situación difícil es así porque hay algo del karma “negativo” que traemos arrastrando, más allá de si lo estemos haciendo mal o bien en ese momento. Y En toda buena situación, una fracción de su existencia es gracias a una buena cosecha de acciones pasadas armoniosas.
  8. Cuando una persona no tiene consciencia de que hasta sus más mínimas acciones condicionan su futuro (esto quiere decir que no sabe qué es karma) pues tampoco tendrá las herramientas para sanar el karma manifiesto en situaciones difíciles. Es decir, que cómo no tiene herramientas para sanar el karma “negativo” que viene arrastrando y que se le manifiesta en las situaciones difíciles actuales; la persona va a actuar incorrectamente generando más karma “negativo” y este se va a sumar al que ya tenía que no supo sanar por no tener herramientas. Entonces sus situaciones futuras serán aún más difíciles que las anteriores, porque cada vez tendrá más karma “negativo” acumulado. Ocurre entonces un efecto de “avalancha” de situaciones cada vez peores; “siempre se puede estar peor”.
  9. Este tipo de personas forman sociedades y son estas las que se conocen como “sociedades en decadencia”. Yo las suelo llamar “sociedades kármicas”, porque de momentos difíciles, salen cada vez peores cosas y todos los días se descubren más y más miserias de su población. Son las sociedades típicas donde cada día suceden cosas peores; donde no se adivina ni el final ni el fondo ni la salida, donde lo que parece lógico (Ley de Atracción) nunca sucede y donde generalmente se espera a un “Mesías” que la salve (por supuesto, sus integrantes no tienen la más mínima idea de qué hacer, mas allá de embarrarla todos los días un poquito más)
  10. Pero una característica del karma es que las energías que cultivamos con nuestras acciones tardan cierto tiempo en manifestarse de vuelta (años, décadas, vidas). En condiciones normales (una sociedad que tenga consciencia del karma) este retardo es una bendición, ya que si en algún momento nos equivocamos por inmadurez, lo que generó karma “negativo”, tendremos algún tiempo para crecer y adquirir las herramientas espirituales necesarias para sanar ese mismo karma cuando se manifieste años o vidas después.
  11. Pero en una sociedad sin entendimiento del karma y sin crecimiento espiritual real, el tiempo que demora el karma en manifestarse actúa es perjuicio. En esos escenarios de ignorancia, simplemente actuamos sin consciencia, generamos karma, no lo sabemos y cuando ese karma se manifieste en situaciones futuras peores, no tendremos ni idea del porqué se sufren esas situaciones. No hay conciencia de los actos errados y por tanto no se entenderán las consecuencias cuando aparezcan. Estas son las señales claras del Armagedón.

El “fin del mundo” se antecede por caos, generalmente un caos social y/o personal. Y definitivamente el nulo o equivocado “crecimiento espiritual” y la no consciencia de que nuestras acciones nos traen consecuencias (Ley de Acción y Reacción como se conoce también a la Ley del Karma) traen, por lo que acabo de puntualizar, un caos en la existencia de cualquier persona, sociedad, país, planeta.

Pero no todo está acabado, todavía queda una opción: “la destrucción de todo”. Vuelvo a la frase del “ya no hay tiempo, el fin se acerca”. El caos en la naturaleza se consume hasta que desaparece; y la forma de hacerlo en un grupo de seres que se está autodestruyendo con el karma, es “acortando los tiempos” (de allí que “ya no hay tiempo”). ¿Pero cuáles son los tiempos que se acortan? Son los tiempos que tarda el karma en manifestarse una vez generado.

Pues esa sí es la solución final; apenas hagamos algo inapropiado, por acción y reacción sufriremos las consecuencias de forma casi de inmediata. Esto nos permitirá darnos cuenta de lo que siempre se ha dicho, pero ya sin servirnos para mucho, porque no existirá el tiempo aquel de gracias para madurar y sanar.

Antes de que eso llegue, el consejo de los profetas es el correcto: “arrepiéntanse”, lo que en nuestra reflexión significa “limpien karma” (no tengan deudas kármicas); porque una vez que los tiempos se acorten todos nuestros karmas “negativos” se manifestarán a la vez de forma violenta y será “el rechinar de dientes”. ¿Cuánto falta para esto? ¿Ya estamos allí? Únicamente Dios sabe.

Si tu realidad, si tu sociedad, se ve reflejada en estos párrafos, a lo mejor estás a tiempo de hacer algo. Igual, siempre puedes continuar ignorando las cosas, pero después no pidas ayuda, “guerra avisada no mata soldados”.


“Una persona o una sociedad sin una relación madura con Dios, está destinada a una existencia kármicamente complicada”. PAGR2013


Namasté.
Pedro A. Gómez Ruzzo.
Master Reiki Usui-Tibetano, Karuna Ki, Reiki Mineral
Original: 12 de noviembre del 2013.
Twitter: @eReiki @EvolConsc @pagr777

4 comentarios:

  1. No hay mucho que comentar ante verdades tan lapidarias. Esto me hizo recordar unos graffitti que aparecieron hace bastante tiempo por Ccs: " Cristo viene y viene arr...." Estamos montando nuestro propio Armagedon. Después, a llorar al Valle...
    CEH

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  2. Aplica perfecto en lo que esta pasando en nuestro pais (sociedad), es preocupante que la mayoria de los habitantes no tengan herramientas para limpiar el karma o no sepan que es.Por eso la avalancha se nos viene encima. Que hacer?: "crecimiento espiritual", pero como lograr que las personas hagan lo que corresponde....? Excelente articulo Maestro!!!
    Namaste. Marianela

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  3. Quizás esta es la interpetación más acertada acerca de la profecia del fin del mundo presagiado para el 2012. Es decir, el tiempo de "gracia" es cada vez más corto y, en consecuencia, la urgencia para trabajar en nuestra evolución espiritual y limpieza de karmas negativos es más imperioso que nunca. No se refería a la destrucción física del mundo sino es el tiempo que nos toca enfrentarnos al desmoronamiento de nuestro mundo interior.
    Gracias Maestro por esta excelente reflexión,
    Pue Fang

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  4. Si .... " A limpiar karma" !!..... y rápido ! Y no acumular más ...... A veces nos vemos envueltos en situaciones donde la pregunta es: ¿Puedo yo hacer algo para cambiar esta situación? ....entonces, a nivel espiritual, mantenernos en una " franja astral alta" es imperativo (lo que tu nos has enseñado), y a nivel terrenal bien valdría la pena "hacerse el pend..."

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