Autor:
Pedro A. Gómez Ruzzo
El Domingo de
Pascua de Resurrección, para nosotros los cristianos, es un día de muchísima
importancia. ¿Pero se le da el enfoque correcto?
Aquí pretendo
únicamente ser consistente con lo que he dejado escrito anteriormente sobre La Semana Santa , dentro
de mi enseñanza Crística. Esta va a ser una reflexión sencilla, porque la
resurrección marca el punto de llegada de un camino muy largo; de un recorrido
por toda la enseñanza cristiana. La resurrección es un fin afortunado, más que
necesario, para todos los cristianos. A lo mejor este artículo le sirve más a
los “no-cristianos”, que a los ya comprometidos con Jesús.
Lo primero que
debo puntualizar, una ve más, es la diferencia entre “reencarnación” y
“resurrección”. Lo voy a hacer fácil y básico.
Si bien el
proceso de “reencarnación” no es aceptado por la mayoría de las iglesias
cristianas (aunque se puede inferir muy bien desde distintos versículos de la Biblia ), este plantea que
la parte “no-física” de un individuo (alama/esencia/espíritu), una vez que
fallece y pasado cierto tiempo, vuelve a “tomar carne” para pasar nuevamente a
tener vida terrenal, vida biológica.
Entonces la
reencarnación es el proceso repetitivo de muerte física y nacimiento físico,
las veces que sean necesarias.
Por el contrario,
el proceso de “resurrección” no es repetitivo; de hecho hay uno solo y se lleva
a cabo cuando el alma/esencia/espíritu de un ser humano al morir, y luego de
“habérselo ganado”, puede pasar a tener la
Vida Eterna (no “vida biológica”
nuevamente).
En la Biblia , cuando se habla de
Vida, se habla de la “Vida Verdadera” al lado del Dios Padre, en el Cielo. Y
una vez que morimos a nuestra vida física y logramos entrar en el Cielo, pues
no necesitamos volver a venir más; ya nos ganamos el cielo. Por eso la resurrección
es un hecho único y puntual.
Resumo:
-
Reencarnación:
proceso repetitivo de vida y muerte biológica donde nuestra parte espiritual
puede volver a vivir en esta tierra, aunque en diferentes personas (cuerpos) y por
tanto circunstancias.
-
Resurrección.
proceso único donde nuestra parte espiritual, luego de habérselo ganado, nace
nuevamente en el Cielo (Junto al Padre) y por lo tanto no vuelve a salir de
allí (referencia a nuestra salida del Jardín del Edén del Libro del Génesis)
Si volvemos a
Jesús, nuestro Señor volvió con el Padre que está en los Cielos (infinidad de
referencias en la Biblia ,
por ejemplo Juan 14;2-4). Jesús entonces resucitó, no reencarnó.
¿Pero y esto por
qué importancia tanto? Él lo logró, era de esperarse ¿pero nosotros?
Si han seguido
mis reflexiones anteriores, recordarán que el cristianismo es un asunto de
preparación para alcanzar esa Vida eterna a la que todos “deberíamos” querer
llegar.
Jesús se cansó de
repetir que “su reino no era de esta tierra”; y Él, en toda su enseñanza, nos
planteó la forma de vivir para que
nuestra existencia terrenal diera buenos frutos al morir; es decir para que
pudiéramos llegar al Padre.
Entonces, Jesús
enseñaba, predicaba, actuaba y sobre todo esperaba un desenlace que pudiera
demostrarnos a nosotros que todo lo que Él decía era verdad. Ese desenlace era
su propia muerte y posterior resurrección.
Más de una vez se
lo recordaba a sus discípulos; la referencia que Él mismo hace con la
destrucción del Templo y su reconstrucción en tres días (Juan 2:19-22) y en los referidos versículos
anteriores de Juan 14;2-4.
Así que la
resurrección de Nuestro Señor Jesucristo, más allá de cualquier aspecto
erudito o metafísico; viene a significar para nosotros cristianos (seguidores
de sus enseñanzas) que todo lo que Él enseñaba es correcto y SIRVE. ¡A Él
le sirvió actuar como enseñaba y hacer lo que decía! Es decir, que si nosotros
nos comportamos como Él nos enseñó, también podemos llegar al Padre.
Imaginemos a
Jesús resucitado apareciéndose de repente a sus discípulos cuando estaban reunidos
pasando el luto. Él llegaría diciéndoles: “¿Vieron? Se los dije, aquí estoy
resucitado; para que me crean que lo que yo les enseñé sí sirve”
Y aún así, más tarde Tomas no creería y Jesús les mostró sus llagas para
que creyera... ¿Las llagas? ¿Para qué tuvo que venir con sus heridas? ¿Su
parecido físico no era suficiente? ¿Nunca se lo preguntaron ustedes mismos?
(Secreto de niveles superiores de La
Biblia )
Agárrense fuerte.
Las heridas en Jesús resucitado fueron necesarias porque era la forma en que
Jesús podía demostrar que había
resucitado y no reencarnado.
En la
reencarnación se asume que el espíritu vuelve en otro cuerpo (así como una vez
vino Elías en Juan el Bautista - Mateo 17,10-13), pero en la resurrección se
viene “igual que en su última vida”. Por esto Jesús usó las marcas de su última
muerte física para que vieran que era Él y que no tuvo necesidad de tomar otro
cuerpo físico para venir a ellos (Juan 20:19-20)
Todo es así de
sencillo; claro, para un cristiano verdadero.
Por eso, en la Pascua de Resurrección los cristianos festejamos
que toda la enseñanza que Jesús nos dio “sí sirve para llegar al Padre”; ya que
Él mismo lo demostró con su resurrección.
Así que hoy,
Domingo de Resurrección, es un momento especial para tomar la decisión de
adoptar, retomar o reforzar nuestra vida de cristianos con todas las promesas
claras y demostradas finalmente por Jesús.
Feliz domingo de
resurrección.
Namasté.
Pedro A. Gómez Ruzzo.
Master
Reiki Usui-Tibetano, Karuna Ki, Reiki Mineral
Original:
20 de abril del 2014.
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Palabras
claves: domingo, santo, pascua, resurrección, Jesús, llagas, heridas, semana, discípulos,
tomas, creer, reencarnación
Maestro que hermoso mensaje para hoy domingo de Resurrección, muchas grcias
ResponderEliminarJohana Plaacios M.
Muy feliz Pascua de Resurección. A recorrer el camino que Jesús nos dejó, todo iluminado, asfaltado, resguardado y probado por él mismo.
ResponderEliminarNamasté,
Pue
Yo me pregunto porqué nos cuesta tanto aceptar la promesa de llegar al Padre a través de las enseñanzas de Jesús. ¿Será que no la creemos o que no nos interesa llegar al Padre algún día? En el fondo mucha gente que se dice cristiana no cree en la Resurrección, en la vuelta a la casa del Padre... O a lo mejor no lo entendemos del modo correcto. Hay una visión ingenua que nos hace creer que nos vamos a reencontrar con los seres queridos que ya se han ido, cuando lo verdaderamente importante es llegar al Padre usando las instrucciones que dejó Jesús.
ResponderEliminarOjalá muchas personas lean este artículo para que vean luz.
Namasté Maestro.
CEH
Maestro gracias por este regalo y por tu insistencia, al igual que Jesús, que vivamos nuestra vida terrenal de manera que podamos llegar al Padre. Namaste
ResponderEliminarMarianela
Gracias Maestro,por seguir metiéndonos el dedo en la llaga,a ver si nos ponemos más que bien las pilas.Namasté
ResponderEliminarQue bonito Maestro! Gracias por recordarnos las enseñanzas de Jesus y ayudarnos a ponerlas en practica de una manera mas sencilla!
ResponderEliminarNamaste!
Amanda Palma Slaimen