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lunes, 26 de diciembre de 2016

Nuestros hijos nos eligen antes de nacer

Autor: Pedro A. Gómez Ruzzo

Partiendo de la base holística de que somos seres integrales, además de nuestro ser terrenal, también tenemos nuestra alma y nuestro espíritu.

Cuando nacemos, nuestro par alma-espíritu encarna; esto significa que toma manifestación física a través de un bebé que se forma en la barriga de alguna mamá.

Pero cabe preguntar, ¿acaso hay alguna intención particular para que un alma-espíritu decida encarnar en alguna mamá en particular?

Antes de responder esa pregunta, reflexionemos sobre el porqué reencarnamos.


Por qué reencarnar

Definitivamente un alma (alma-espíritu) aun sin reencarnar puede estar bastante tranquila en el plano astral. Venir a reencarnar en plano físico no es precisamente venir de vacaciones.

Las limitaciones y las experiencias mentales de este plano terrenal, no son necesariamente gratificantes para un alma que estaba en un plano más cerca de Dios antes de venir. Allá donde tenía muchas menos limitaciones.

Esta idea es básica a nivel místico, ya que echa por tierra la falsa creencia que nacemos para ser felices. Si Dios quisiera solo nuestra felicidad, pues no nos hubiera hecho reencarnar.

Pero entonces ¿qué busca Dios haciéndonos reencarnar?

Toda alma-espíritu tiene una única misión; y esta es volverse cada vez más sutil para poder ir subiendo al Cielo. Una vez allí fundirse con Dios.

Pero toda alma tiene partes que suelen ser densas, que le impiden el ascenso hacia Dios.

Estas energías densas son muy parecidas a las energías terrenales. Por eso, para limpiarlas, tiene que volverse terrenal; tiene que reencarnar. Aquí en el plano físico debe purificarlas.

Entonces, toda alma-espíritu debe reencarnar (las veces que sean necesarias) para intentar limpiar o purificar sus energías densas, esas que no la dejan ascender para llegar a fundirse con Dios en el Cielo.

Y he dicho bien, “intentar purificar” sus energías densas. Esto implica que dicho intento puede ser exitoso o desastroso.

Sí; cuando digo desastroso me refiero a que un alma-espíritu puede venir a tratar de limpiar y puede quedar más sucia que antes.


Cómo un alma purifica sus energías densas

La purificación de las energías densas la realiza un alma aprendiendo ser más espiritual que terrenal, mientras esté reencarnada.

Podemos plantear al Ser integral encarnado como conformado por tres aspectos:

Ser encarnado = Terrenal-Álmico-Espíritual

Mientras el Ser encarnado se comporta más Terrenal-Álmico, sus energías se ensucian más.

Mientras que sus energías se limpian cuando el Ser encarnado aprende a ser más Álmico-Espiritual.

Lo Terrenal obliga al Ser a múltiples reencarnaciones retardando su entrada en el Cielo, mientras que lo Espiritual rompe con el ciclo de reencarnaciones y le permite Resucitar (entrar al Cielo).

Pero para esta limpieza, un alma debe utilizar sus experiencias duras de vida encarnada. Si en dichas experiencias el alma se comporta espiritualmente, sus energías se purifican. Por el contrario, si en las experiencias duras el alma no logra (o no sabe) comportarse espiritualmente, el resultado será mayor basura para ella misma.

Pero ella no puede hacerlo sola.


Esperando ayuda, por favor.

Y aquí volvemos con nuestros hijos.

El alma-espíritu de nuestros hijos, sí nos escogen (tanto a mamá como a papá). Y lo hacen con una intención clara: la intención de que tanto mamá como papá la ayuden a asumir las situaciones duras de la vida de forma espiritual. Para eso vinieron.

Mamá y papá ya deberían tener varios años aprendiendo a vivir las situaciones difíciles de forma espiritual. Y por lo tanto, eso mostrarán y enseñarán a esos seres que nacen de sus entrañas. Eso es lo que se espera.

Si mamá y papá no dan el acompañamiento espiritual correcto hacia sus hijos; si mamá o papá solo se ocupan del bienestar terrenal de sus hijos; lamentablemente estarán corriendo el riesgo de que el alma del niño se condene cuando comiencen a enfrentar sus propias situaciones difíciles y no sepan asumirlas de forma espiritual.

Pero atención, el acompañamiento espiritual correcto no se refiere a ofrecerles solo los sacramentos (bautismo, primera comunión, confirmación, etc.), ni tampoco a obligarlos a ir a misa los domingos, ni enseñarles a rezar o a bendecir las comidas.

Nuestros hijos, los cuales aprenden por imitación, deben ver a mamá y a papá (idealmente a ambos) comportarse espiritualmente de forma correcta en sus situaciones cotidianas.

Y la correctitud espiritual implica que mamá y papá cumplan con los lineamientos dictados por su doctrina espiritual, en cada situaciones de vida. Así aprenderán nuestros hijos.

Si nuestros hijos ven a mamá o a papá actuando muy terrenalmente y dejando de lado la correcta actitud espiritual, ¿creen que cuando grande ellos van a ser espirituales?

Dependiendo de las actitudes de mamá y de papá (repito, no hablo de ir a misa o al templo) les daremos la oportunidad a las almas de nuestros hijos de limpiarse o de embarrarse más.


Mamá y papá preparados

Pero comportarse correctamente a nivel espiritual no es solo “comportarse bien”. La correctitud espiritual implica actitudes de vida que con mucha seguridad se desconocen o no se comprenden. En el caso cristiano nos referimos básicamente a lo detallado en Mateo 5,6 y 7 de nuestra Santa Biblia.

Es por esto por lo que en honor de nuestros hijos, mamá y papá deben formarse espiritualmente.

Esta formación se debe realizar recorriendo un camino de crecimiento espiritual para prepararse a sí mismos y con sus estilos de vida poderles brindar a sus hijos el ejemplo de cómo se vive espiritualmente. No es cuestión de libros o conocimientos; es cuestión de cómo se asume la vida.

Si los padres se forman, sus hijos purificarán sus energías del alma y así podrán cumplir con la misión para la cual vinieron: la de acercarse al Cielo.

Si mamá y papá no se preparan, estarán condenando el alma de sus hijos aunque les hayan dado mucho amor, alimentación, educación, cobijo, comodidades y bienestar.


Tener hijos no es un juego. Nuestros hijos nos eligen antes de nacer y ellos esperan que les ayudemos a ser espirituales.

Pero en esta modernidad, con una relación de comiquita con Dios, se defienden los derechos de nuestros niños y se habla de alimentación, salud, vida, identidad, educación, cariño... pero nadie se entera de los Derechos Espirituales de los Niños; ni siquiera nuestras iglesias modernas.

Después preguntamos el porqué nos va mal.

Dios te bendiga.
Namasté.

Pedro A. Gómez Ruzzo. (SSA)
Master Reiki Usui-Tibetano, Karuna Ki, Reiki Mineral
Original: día 361 A.S. (26 diciembre 2016)
Twitters: @pagr777 @eReiki @EvolConsc @SanaCristica
Facebook: https://www.facebook.com/groups/PedroAGR/
Palabras-claves: reencarnamos, reencarnar, derechos espirituales de los niños, mamá, papá, Cielo, Dios, lineamientos espirituales,

3 comentarios:

  1. Hola Maestro.

    Gracias por el articulos.

    Definitivamente, esta dificil llegar al padre viendo como es nuestra sociedad hoy; claro, no imposible!

    De igual manera, la vida en la tierra parece nunca acabarse, con el ciclo de reencarnaciones.....parece la vida terrenal ser infinital!

    Una pregunta: o sea, q las energias densas no se trabajan en astral? O es dificil?

    Namasté.

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    Respuestas
    1. Namasté.
      Hola Samir.
      Sí, hay energías que se depuran en plano astral, es decir sin estar encarnados. Pero mientras estemos aquí nos ocupamos de las que, for la fuerza, solo se depuran en el plano físico.
      Namasté

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  2. Namasté 🙏🏻,Vengo de una familia que no practica ninguna religión y así también lo venia haciendo tristemente con mis hijos...pero gracias a sus enseñanzas Maestro, estoy tratando de aplicar a mis hijos, el compromiso espiritual que tenemos con Dios que va va más allá de lo terreral, Si Dios lo permite espero acercar un poco más a mis hijos a Dios...Gracias Maestro por el articulo, Namasté

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