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lunes, 9 de enero de 2017

Por qué Dios es tan difícil de asumir correctamente

Por qué Dios es tan difícil de asumir correctamente
Autor: Pedro A. Gómez Ruzzo

A. Adhikari:         Namasté. Maestro ¿cómo está?Tengo días reflexionando en lo que usted ha venido diciendo sobre eso de “salir de nuestra zona de confort”.Y me suena tan lógico eso de “dejar de ser lo que somos para poder ser mejores; y dejar de hacer lo que hacemos para poder tener cosas mejores de las que tenemos”, que no entiendo porqué las personas no lo hace.En mi humilde experiencia en esto de crecer espiritualmente, usted mejor que nadie sabe lo que me ha costado; y aprovecho para darles las gracias por aún permitirme estar a su lado.Y creo que me ha costado porque no es fácil aprender cosas nuevas que no solo son nuevas, sino que muchas veces echan por tierra lo que hemos aprendido antes.Y el esfuerzo personal que hay que hacer también es “digno de valientes”, como dice usted.Pero ante todo ese esfuerzo, uno comienza a darse cuenta de lo bendecimos que somos cuando comenzamos a hacer pequeños ajustes en “nuestra relación con Dios” (eso me gustó mucho cuando usted me explicó qué era crecer espiritualmente).Pero sigo con mi interrogante ¿por qué habiendo tantos beneficios, las personas no asumen su crecimiento espiritual?

Maestro (SSA):    Namasté. Bien Adhikari, gracias.
La respuesta a tu interrogante es sencilla. Hay por lo menos tres razones importantes por las cuales las personas se resisten a asumir su crecimiento espiritual, o lo hace sin involucrarse totalmente, o simplemente no lo consideran necesario.
La primera razón es que nuestra sociedad moderna nos ha vendido a un Dios que tiene la obligación de ayudarnos. Parece que para eso Dios existe. Igual con los ángeles, con la Virgen o con los santos.
La gente asume que ellos tienen mandato divino de quitarnos todos los problemas, y para colmo sin exigirnos nada, más allá de rezar un rato, de orar, de encender unas velas, de llevar un relicario, o simplemente agradecer y tener “fe”.
Cuando se habla de la verdadera espiritualidad, estos seres espirituales actúan según nuestro merecimiento; y la mayoría de las veces lo hacen en favor de nuestro bien espiritual; no de nuestro bienestar terrenal.
Esta primera razón es la que aleja a las personas de un compromiso con su espiritualidad o simplemente no la dejan entrar.
Si te han vendido a un “Dios gratis” ¿Para que vas a trabajar para merecerlo?
La segunda razón es que han enseñado a la gente a depender de sus propias fuerzas. El esfuerzo personal hacia las metas humanas, tangibles; es lo que persigue una sociedad sin Dios. El bienestar terrenal es lo más importante; la muerte es lo peor que le puede pasar a alguien.Y es hasta lógico; si tu no estudias tus lecciones, lo peor que te puede pasar es que llegues al examen final. Y la muerte es un examen final cuyo resultado dependerá de cuánto te afanaste por Dios mientras vivías,
Entonces, en una sociedad que espera resultados concretos y tangibles ¿quién se va a dedicar con intensidad a esas cosas de Cielo y la Vida Eterna? Eso no se puede medir en número ni en un informe de rendimiento ni se puede colocar en tu
curriculum vitae; nadie te paga, ni te emplea, ni te quiere más por afanarte en las cosas de Dios.
Con este escenario sociocultural; casi nadie descubre que lo mejor que te puede pasar en la vida se llama “descubrir a Dios”; ya que cuando eso pasa los problemas se hacen más pequeños y algunos hasta se solucionan rápido.
La tercera razón es el terror al sufrimiento. La gente critica a la idolatría; pero esta sociedad adora, se afana y le rinde un culto inmenso al “bien-estar”. Las personas idolatran al bienestar económico, físico, mental y emocional; lo tienen como meta más importante; y su relación y compromiso con Dios quedan relegados a “cuando haya tiempo”.El primer mandamiento en nuestra sociedad parecería ser “Amarás al Bienestar sobre todas las cosas; con toda tu mente, con todas tus fuerzas y con todo tu corazón”; Dios puede esperar.
Pero eso sí, dejamos de lado el primer mandamiento de amar a Dios sobre todas las cosas, pero cuando necesitamos de Él, Él debe venir corriendo a ayudarnos.

Por eso, el sufrimiento es sinónimo del Diablo. No es raro que cuando una persona sufre, siempre busque qué o quién le está haciendo daño; sin saber que el sufrimiento es el comienzo del crecimiento espiritual.
Desde el punto de vista espiritual, el sufrimiento no es más que la señal de que algo estás haciendo mal; y por lo tanto debes corregir. Y mucha de esa corrección es sobre la forma de pensar y la forma de asumir tu vida; lo que se debe corregir desde el espíritu. Una situación difícil es simplemente una oportunidad de crecimiento espiritual; al igual que un examen es una oportunidad de aprobar un curso.
Pero sacarle el cuerpo al sufrimiento por ser lo peor que nos puede pasar, es como querer aprobar un curso pero sin presentar los exámenes. Claro, ir a presentar un examen no es el único requisito para aprobar el curso, debiste haber estudiado. El sufrir una situación difícil, no significa aprender de ella ni crecer; tuviste a haber aprendido a ser espiritual. Los exámenes se pueden reprobar; las situaciones difíciles también.

A. Adhikari:         ¡Wow!, Maestro; imagino que hay más razones, pero solo con esas me queda claro.
Pero si está tan claro ¿por qué es tan difícil derribar estas razones para que todos podamos vivir bien?

Maestro (SSA):    Es difícil convencer a las personas de siquiera reflexionar sobre estas razones, porque precisamente esas razones están presentadas, avaladas y sostenidas por instituciones de muchísimo peso; instituciones que han sido formadas y están siendo dirigidas por personas más humanas que espirituales.
Hablo tanto de gobiernos, empresas, así como de iglesias.
Siento que no hay mala intención en ninguno de ellos; lo que si hay es un desconocimiento inmenso de lo que significa realmente ser espiritual; sí, incluso en los que se dicen espirituales.

A. Adhikari:          Maestro, la inquietud que traía se dividió en muchas otras preguntas; pero no le preguntaré más por ahora. Prefiero quedarme un rato tranquilo para que su enseñanza germine y eche raíces.
Gracias de corazón.
Namasté.

Maestro (SSA):    Me alegra mucho que actúes así, Adhíkari; has aprendido bastante.
Dios te siga bendiciendo.
Namasté.


Pedro A. Gómez Ruzzo (SSA).
Master Reiki Usui-Tibetano, Karuna Ki, Reiki Mineral
Original: 375 A.S. (09 enero 2017)
Twitters: @SanaCristica @eReiki @EvolConsc @pagr777 @AdamaConsc

Palabras-claves: iglesias, gobiernos, Dios, asumir, difícil, sociedad, moderna, sufrimiento, enseñanza, crecimiento, espiritual, espíritu, exámenes, curso, aprobar, reprobar.

1 comentario:

  1. Apostamos a mantener nuestro estado de confort y esto significa que estemos bien desde el punto de vista terrenal, viviendo bien? considerando en menor proporción el crecimiento espiritual.

    Parece que es mas importante tener la razón, y en hacer y pensar lo que el resto hace y piensa para no desencajar y mantenernos dentro.

    Pero eso es lo que realmente queremos?

    Muchas gracias Maestro, siempre sus palabras logran removerme y hacerme reflexionar sobre el camino que debo seguir.

    Namaste!

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