Autor:
Pedro A. Gómez Ruzzo
Un día, los
apóstoles recibieron de su Señor y Maestro Jesús, las instrucciones para poder
vivir acorde con lo que Dios Padre quería. Fue en el Sermón del Monte (Mateo
5-7), donde la pregunta de “qué debemos hacer entonces Señor” fue respondida de
forma clara y sencilla. Cosas como: no juzgarás, no te enfadarás con tus
hermanos, poner la otra mejilla, amar a sus enemigos; eran lineamientos básicos
para los apóstoles
Luego, estos mismos apóstoles fueron enviados a que
recorrieran el mundo y predicaran la Palabra y a que formaran iglesia; grupos
personas que aprenderían lo que se les había enseñado a ellos.
¿Qué se ha hecho
la herencia de esos apóstoles oficiales hoy?
Extraño a mi
iglesia y a los apóstoles enviados; donde más que dar misa, deberían estar no
solo recordándole a la gente que no se debe juzgar, sino que deberían decirle qué significa eso y
cómo hacerlo.
Extraño a mi iglesia
y a los apóstoles oficiales que debería enseñar a amar a nuestros enemigos,
pero no solo recordarlo sino diciendo el porqué, el para qué y cómo lograrlo.
Extraño a mi iglesia
y a los apóstoles oficiales que debería no solo recordarnos el Sermón del Monte
en una misa cualquiera, sino que debería convencernos del porqué cumplirlo y del
cómo hacerlo.
La herencia de
los apóstoles parece perdida. Muchas iglesias se ocupan de reformas
renovadoras, revolucionarias y mediáticas con respecto a su estructura, pero se olvidan
de que la forma básica de vivir que fue promulgada no se imparte, no se aplica
y peor aún la gente no sabe cómo hacerlo.
¿Para que les
envió Jesús? Acaso solo ¿a cambiar estructuras? ¿a modificar estamentos? ¿a
estrechar la mano de otros líderes para acordar una supuesta paz que ellos
mismos destrozaron?
Extraño a mi
iglesia y a los apóstoles oficiales que deberían estar gritando a los cuatro
vientos lo enseñado en el Sermón del Monte; y parece que solo está cuidando su
existencia terrenal y ocupándose de estructuras, de acuerdos y de cosas que
pueden esperar.
Extraño a mi
iglesia que debería ocuparse de enseñar a la gente a vivir dentro de la
adversidad para que no se alejen de Dios; y solo está ocupada en el maquillaje
y del postín individualista de la imagen institucional.
Más les vale que
cumplan con sus misiones y que inviertan los talentos y las jerarquías
otorgadas: vendrá un día el Señor a pedir cuentas y si sus talentos no dieron
frutos, se les enviará a “las tinieblas de afuera; allí será el lloro y el
crujir de dientes” (Mateo 25:
14-30); ¿o es que eso también lo olvidaron o nunca lo creyeron o pensaron que
era solo para el pueblo?
Extraño a la
iglesia y a sus apóstoles oficiales, que tenían temor de desobedecer o ignorar
a Dios.
Extraño a la iglesia
y a sus apóstoles oficiales, que ponían a Jesús por delante; hoy parecen que lo
esconden; ya que no gritar sus enseñanzas es dejarlo de lado.
Los apóstoles
oficiales de hoy se sienten “apoyados” porque se creen parte de la Herencia
Divina; pero ya lo dijo Juan El Bautista una vez:
“8... den frutos dignos de arrepentimiento; y no
comiencen a decirse a ustedes mismos: ‘Tenemos a Abraham por padre,’ porque les
digo que Dios puede levantar hijos a Abraham de estas piedras. 9 El hacha ya
está puesta a la raíz de los árboles; por tanto, todo árbol que no da buen
fruto es cortado y echado al fuego.” (Lucas 3:8-9)
Extraño a la
iglesia y a los apóstoles oficiales que deberían ocuparse desesperadamente de
decirle a la gente cómo hacer para cumplir con lo que Jesús ordenó en el Sermón
del Monte:
-
“...todo
aquel que esté enojado con su hermano será culpable ante la corte; y cualquiera
que diga: ‘Insensato (Inútil)’ a su hermano, será culpable ante la corte
suprema (el Sanedrín); y cualquiera que diga: ‘Idiota,’ será merecedor del
infierno de fuego” (Mateo 5:21)
-
“...reconcíliate
primero con tu hermano” antes de acudir a Dios (Mateo Mateo 5:23)
-
“...Ponte de acuerdo pronto con tu adversario
mientras vas con él por el
camino...” (Mateo 5:25)
-
“...Si tu ojo derecho te hace pecar arráncalo y
tíralo; ... si tu mano derecha te hace
pecar, córtala y tírala...” (Mateo 5:29)
-
“... todo el que se divorcia de su mujer, a no
ser por causa de infidelidad, la hace cometer adulterio...” (Mateo 5:31)
-
“...Ni jurarás por tu cabeza, porque no puedes
hacer blanco o negro ni un solo cabello...” (Mateo 5:36)
-
“...a cualquiera que te abofetee en la mejilla
derecha, vuélvele también la otra...” (Mateo 5:38)
-
“...amen a sus enemigos y oren por los que los
persiguen...” (Mateo 5:43)
-
“...cuando des limosna, que no sepa tu mano izquierda lo que hace tu derecha...”
(Mateo 6:2)
-
“...cuando ores, entra en tu aposento, y cuando
hayas cerrado la puerta, ora a tu Padre que está en secreto, y tu Padre, que ve
en lo secreto, te recompensará...” (Mateo 6:5)
-
“... si (ustedes) no perdonan a los hombres,
tampoco su Padre les perdonará a ustedes sus transgresiones (faltas, delitos)...”
(Mateo 6:14)
-
“...cuando ayunes, unge tu cabeza
y lava tu rostro, para no hacer ver a los hombres que ayunas....” (Mateo 6:17)
-
“...No acumulen para
sí tesoros en la tierra, donde la polilla y la herrumbre destruyen... sino acumulen tesoros en el cielo... porque donde esté tu tesoro, allí estará
también tu corazón...” (Mateo 6:19)
-
“...Nadie puede servir
a dos señores; porque o aborrecerá a uno y amará al otro, o apreciará a uno y
despreciará al otro...” (Mateo 6:24)
-
“...busquen primero (el
Reino de Dios) y su justicia, y todas las (buenas) cosas les serán añadidas...”
(Mateo 6:33)
-
“...No juzguen para
que no sean juzgados...” (Mateo 7:1)
-
“...todo cuanto
quieran que los hombres les hagan (a ustedes), así también hagan ustedes con
ellos...” (Mateo 7:12)
-
“...Entren por la puerta estrecha, porque ancha
es la puerta y amplia es la senda que lleva a la perdición...” (Mateo 7:13)
-
“No todo el que Me dice: ‘Señor, Señor,’ entrará
en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de Mi Padre que está en
los cielos...” (Mateo 7:21)
¿Qué es más importante? Cuando hay sociedades destrozadas y
hermanos odiándose, ¿es más importante discutir y anunciar con bombos y
platillos cenas con otros jerarcas religiosos o definiciones sobre quienes
podrán o no oficiar misa? ¿Promover espacios de curaciones milagrosas? ¿Contabilizar
o convencer más feligreses para ver cual iglesia es más poderosa?
Extraño a la iglesia y a los apóstoles oficiales que ante
cualquier argumento de descrédito deberían iluminarse con el Espíritu Santo
para defender las enseñanzas que recibieron de Jesús.
Y no me digan que los tiempos son otros y que la cosa ha
cambiado; porque estarían aceptando que Jesús tuvo su momento y ya no es más; o
que sus enseñanzas ya hay que cambiarlas.
Y no me digan que se están haciendo mejoras, porque están serán
cuando sean evidentes; a la gente no se les ha comenzado a llegar.
Extraño a los apóstoles oficiales que iban a la gente, no a
los de ahora que esperan la gente llegue a ellos; se supone que ustedes son los
pastores.
Ir a la gente significa hacer todo el esfuerzo para que la
gente entienda a Jesús. Si cada persona se pudiera iluminar por su cuenta, los
apóstoles nunca hubieran existido. Honren la confianza que alguna vez se les
tuvo.
Los apóstoles oficiales de hoy deberían estar temerosos esperando
alguna carta de Juan que el Espíritu de Cristo le dictara en el Libro del
Apocalipsis. Aún están a tiempo ¿seguirán esperando?
Disculpen si estoy equivocado en todo esto y el trabajo de mi
iglesia sí se está haciendo, pero extraño a la iglesia que trabaja en grupo y
que llega a todas partes; yo no la veo cerca.
Llega el punto en
que es imposible seguir apoyando lo indefendible. Dios aboga por sus hijos; y
cuando sus sirvientes callan, él hace gritar hasta a las piedras.
Pedro.