Autor:
ShaniShaktiAnanda
Cuando
se desea estar bien integralmente (con control, sin sorpresas ni
imprevistos) es muy recomendable ver la vida desde la visión amplia
de nuestros planos de existencia. Y uno de los planos menos
entendidos pero más importantes es el energético; para todo nuestro
bienestar, incluyendo el espiritual.
Absolutamente
toda interrelación humana es energética en un altísimo porcentaje,
mucho más que física, mental o emocional. Esto es una realidad
aunque no se entienda o no se comparta.
Incluso
en las cosas cotidianas no solo estamos involucrando algunas partes
de nuestro Ser de forma evidente; sino que siempre involucramos toda
nuestra estructura energética.
Este
es el caso de solicitar, recibir o conceder favores. Incluso recibir
los favores que no se han solicitados (halagos y detalles).
Comencemos con esta frase:
“ Nadie
pide un favor para sentirse mal. Todo favor solicitado implica una
solicitud de bienestar a otra persona; todo favor recibido implica
una aceptación del bienestar de la otra persona.” SSA
Solicitar
un favor, recibirlo o concederlo, es un acto de humanidad entendible,
bien visto y que incluso puede llegar a ser altruista. Pero debemos
recordar siempre que nosotros, como seres espirituales, no podemos
vivir desde la visión humana de la vida; que a pesar de ser buena,
lógica y conveniente; puede estar en contra de nuestra integralidad
y acarrear problemas en nuestro Ser.
El
bienestar en nuestro Ser está directamente asociado a nuestra
energía del segundo chakra (Swadhistana). Esta energía es nuestra
energía vital, la cual se utiliza para que todas nuestras funciones
de vida se mantengan sanas y operativas; y adicionalmente para crecer
y evolucionar espiritualmente. Por lo tanto, esta energía se debe
mantener lo más limpia y lo más pura posible, lo que implica mucho
trabajo intencionado en escenarios particularmente esforzados.
Y
la realidad es que nuestras energías se pueden ensuciar; tanto por
procesos internos propios como por contaminación de otras personas
con las que interactuamos, estás menos limpias que nosotros.
Las
personas interactuamos entre nosotros uniendo nuestros chakras y
compartiendo las energías que correspondan en dicha interacción.
Esto es un proceso automático que determina el tipo de interacción
que tenemos, pero que se puede llegar a controlar con algún
esfuerzo.
Cuando
hablamos de pedir un favor desde el punto de vista energético, sin
importar el trasfondo ni la intención del favor, lo que estamos
haciendo es pedirle a la otra persona que conecte su Swadhistana con
el nuestro y que nos dé de su energía de vital. Así de sencillo.
visto desde el punto de vista energético.
Cuando
recibimos un favor de otra persona (sea un favor solicitado o no),
sin importar el trasfondo ni la intención del favor, lo que estamos
haciendo es aceptar (incluso gozosamente) la conexión del
Swadhistana de esa persona al nuestro y por allí aceptamos su
energía.
Cuando
otorgamos un favor a otra persona (sea un favor solicitado o no), sin
importar el trasfondo ni la intención del favor, lo que estamos
haciendo es conectándonos desde nuestro Swadhistana al Swadhistana
de esa persona y por allí le damos nuestra energía.
Sea
el favor que sea, siempre ocurre así, y si el favor es concedido, el
solicitante termina con la energía de la otra persona en todo su
Ser.
Pero
¿qué sucede si la energía del Swadhistana de la otra persona no es
muy limpia? Pues que la persona pudo haberse favorecido del favor
solicitado o recibido, terrenalmente hablando, pero se pudo haber
comprometido fuertemente para corto o mediano o largo plazo desde
todo su Ser.
Dependiendo
del tipo de favores solicitados, recibidos u otorgados, la energía
que se comparte puede incluir la del primer chakra (Muladhara); y
recordemos que esta es la referencia de la energía del karma. Así
que con una sola petición o recepción de un favor, podemos estar
adoptando parte del karma de la otra persona; o si concedemos el
favor le daremos de nuestro karma a la otra persona.
No
voy a ser extenso aquí señalando las consecuencias de tener una
energía sucia de Swadhistana, matizada muchas veces de karma; pero
recordemos que podemos estar saliendo perjudicado tanto por Ley de
Atracción (que se activa con la energía del Swadhistana) o por la
Ley del Karma (que se activa por la energía del Muladhara)
Entonces,
¿no demos pedir ni recibir ni otorgar favores?
La
idea con esta enseñanza es solo dar el contexto amplio de lo que
sucede en parte de nuestro Ser cuando hacemos algo tan cotidiano como
pedir, recibir u otorgar un favor. Lo que haga cada persona después
de esta información es asunto de cada quien.
Pero
es cierto que hay personas que, por su bienestar terrenal o
espiritual, deberían tomar esta enseñanzas muy seriamente, porque
de no hacerlo le puede acarrear consecuencia no deseadas en función
del esfuerzo que están haciendo; consecuencias físicas/terrenales y
consecuencias espirituales.
Pero
en esto de pedir, recibir u otorgar favores, hay consideraciones
importantes. Si hablamos de nuestra energía de Swadhistana,
posiblemente estará tan limpia o tan sucia como la de nuestros
familiares cercanos (hablo de los cercanos, de aquellos con los que
compartimos diariamente y que son sangre de nuestra sangre, no con
los familiares políticos), así que a la hora de la verdad el
problema de pedir, recibir u otorgar favores a nuestro familiares
cercanos sigue existiendo, pero puede ser que pedirle a no cercanos.
De
forma similar es con el karma. Seguramente tenemos el mismo karma los
miembros de una familia consanguinea, así que los favores entre
ellos se pueden hacer sin mayor compromiso.
Pero
claro está, si hay una intención de cortar las relaciones
energéticas con alguna persona (sobre todo ex-parejas o amigos
problemáticos) lo primero que hay que hacer es sacar de raíz la
solicitud, recepción u otorgamiento de favores hacia esa persona.
Suena inhumano, pero es total y absolutamente correcto desde la
integralidad de nuestro Ser, es una medida que nos salvaguarda
nuestra integralidad; inclusive desde la parte espiritual.
Todo
esto de solicitar, recibir u otorgar favores, está claro que empeora
dependiendo del favor y de la persona que lo otorga o que lo
solicita. Pero estos detalles de la enseñanza los dejo para quienes
tengo cerca.
Todas
estas consideraciones son importantes si nos interesa la integralidad
de nuestro Ser; hay que aprender a ver la vida y todo lo que nos
rodea y todo lo que hacemos desde las diferentes aristas que tiene.
De lo contrario podemos salir perjudicados y moriremos en el intento
de vivir.
Dios
te bendiga.
Namasté.
ShaniShaktiAnanda
Original:
930 AS. (18 de julio del 2018)http://www.shanishaktiananda.org
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Palabras-claves:
favores, energía, espíritu. Karma, ley de atracción, LDA