Sigue a ShaniShaktiAnanda en Facebook



viernes, 14 de agosto de 2015

Entre conversaciones: La voluntad de Dios

Entre conversaciones: La voluntad de Dios
Autor: Pedro A. Gómez Ruzzo

A. Adhikari:    Namasté.
                      Maestro; algunas personas hablan sobre "la voluntad de Dios". Mucha gente se pregunta cuál será la voluntad de Dios. Incluso Usted lo ha dicho muchas veces; pero a mi aún no me queda muy claro.
                      ¿Podría, por favor, explicármela de nuevo?
¿Cuál es la voluntad de Dios?

Maestro:        Namasté
                      A ver, Adhikari. Puedes ver a Díos como un Ser; como una Consciencia; como el Universo; como una Energía; como una Fuerza; como tú quieras.
Pero en cualquier caso, tienes la certeza de que Dios siempre confabula, siempre está a tu favor (así se puede ver el amor de Dios).
Entonces, la voluntad de Dios es sencilla: su voluntad es que estemos en paz; tanto en esta tierra como luego de morir.

A. Adhikari:    ¿Que estemos en paz? Esta es la duda de muchos.
Si Dios quisiera que estuviéramos en paz: ¿por qué Él mismo no nos quita el sufrimiento que muchas veces tenemos?
¿Por qué a veces Él deja que pasemos por penurias?
                      ¿Por qué Él permite cosas complicadas?
Asumimos que Él es "Todopoderoso", entonces ¿por qué a veces parece que hay una fuerza que llamamos "el diablo" que puede más que Él?

Maestro:        Adhikari; puedes estar confundiendo la tranquilidad con la paz. La tranquilidad es un estado de la vida humana donde no hay problemas; mientras que la paz es un estado de tu espíritu que se mantiene a pesar de los problemas.
                        .
Esta vida siempre estará llena de múltiples situaciones; y para a algunas personas, algunas de esas situaciones les parecerán situaciones difíciles, mientras que las mismas situaciones para otras personas pueden ser hasta situaciones afortunadas. Siempre va a ser así.

                      En la muerte de una persona, los dolientes ven una desgracias; pero el dueño de la funeraria ve un ingreso económico que ayudará a cumplir los sueños de su familia.

                      Hoy puede no haber problemas para ti y tener "tranquilidad"; pero mañana te puedes llenar de ellos y haber desaparecido tu "tranquilidad".
                       
                     Si esperas vivir con tranquilidad, andarás a la deriva y con un control incierto de tu vida.

                      Pero por el contrario, si alguna parte de ti desarrolla una fuerza que comienza a hacerte inmune a las situaciones externas cambiantes, puedes comenzar a manifestar ese estado que se conoce como "paz".

A. Adhikari:    Entiendo. Pero ¿cómo se desarrolla esa fuerza?

Maestro:        En realidad la paz ya la tienes; solo que está oculta en eso que a lo mejor no ha terminado de salir de tu ser: tu espíritu. La paz pertenece a tu espíritu.
                       
                      Cuando tú comienzas a vivir de forma espiritual; empiezas a desarrollar inmunidad a los problemas terrenales; y entonces la paz comienza a aflorar y se convierte en lo común.

                      Pero recuerda, ¿cómo desarrollas un músculo en tu cuerpo? Pues con un esfuerzo creciente; cada vez con mayor peso.

                      Entonces, cada situación que te parezca difícil no es más que "peso adicional" en tu vida, para que tus músculos espirituales tenga la oportunidad de fortalecerse y salir.
                       
                      Por eso, si Dios quiere que tengas paz, te necesita más espiritual. Y para tener mayor fuerza espiritual, debes aprender a cargar el peso de las situaciones difíciles.

                      ¿Crees ahora que Dios prefiere quitarte las situaciones difíciles; por lo menos hasta que te hayas fortalecido?

A. Adhikari:    Entiendo; Dios no me exonera de las situaciones complicadas porque espera que yo conquiste mi paz a partir de ella. ¡Estaba sencillo!

                      ¿Es decir que una vez que aprenda a permanecer en paz en las dificultades, estas no son mas necesarias?

Maestro:        Exactamente, ya no serán más necesarias para ti y podrán desaparecer.

Pero cuidado; quiero que entiendas que no tienes más paz por vivir más situaciones difíciles. En cada situación difícil debes aprender, desde esforzarte y conquistar tu paz. Así una tras otra. Si no enfrentas de forma correcta a cada situación difícil, pueden no servirte de nada; e incluso puedes salir peor de ellas.

A. Adhikari:    ¡Por fin entendí lo que significa la Voluntad de Dios! Gracias Maestro. Dios lo bendiga siempre.
                      Namasté.

Maestro:        Dios te bendiga.
                      Namasté.


Pedro A. Gómez Ruzzo.
Master Reiki Usui-Tibetano, Karuna Ki, Reiki Mineral
Original: 14 de agosto del 2015.
Twitters: @SanaCristica @eReiki @EvolConsc @pagr777 @AdamaConsc

Palabras-claves: voluntad de Dios, problemas, paz, esfuerzo

lunes, 3 de agosto de 2015

El éxito: ¿acción o sentimientos?

Autor: Pedro A. Gómez Ruzzo

Muchas personas creen que el éxito está condicionado por la acción; y esto no es totalmente cierto.

Si te mantienes haciendo cosas (esforzándote) con sentimientos difíciles en tu corazón, el resultado será desastroso. En cambio, si mantienes buenos sentimientos, el éxito puede llegar incluso sin mucho esfuerzo.

El asunto entonces es darnos cuenta si nuestros sentimientos son buenos o difíciles; más allá de si hacemos mucho, poco o nada.

Acoto que nunca digo “sentimientos malos”, prefiero decir “difíciles”; ya que muchos sentimientos difíciles pueden parecer buenos; pero aun así nos complican la vida.

Coloco un ejemplo.

Lo que la gente llama un sentimiento de "esperazanza", parecería algo noble; y definitivamente lo es. Pero hay que ver desde cuál energía nace esa esperanza que sentimos.

Esa "verdadera energía" que da origen al sentimiento, es en realidad el “verdadero sentimiento”. Al contrario, lo que expresamos como “esperanza” en este caso, puede ser un pseudosentimiento.

El término de pseudosentimiento ya lo he tratado ampliamente, pero lo resumo de esta manera: “pseudosentimientos son aquellas sensaciones que podemos confundir con nuestros sentimientos, pero que no salen de nuestro corazón, sino de nuestra mente.”

Cuando alguien siente la “esperanza de que algo va a mejorar”, ¿qué tiene verdaderamente en su corazón? ¿Qué energía genera esa “esperanza”?

Una persona puede expresar esperaza cuando: se siente mal por alguna situación actual y le gustaría que fuera diferente; o tiene miedo de que algo vaya a salir mal; o está angustiado de cómo vaya a terminar un hecho.

En estos casos esa “esperanza” es un pseudosentimiento y está naciendo de un malestar actual, de un miedo, de una angustia o de la incertidumbre. Estos últimos son los verdaderos sentimientos detrás de la “esperanza”: el malestar, el miedo, la angustia o la incertidumbre.

Por eso, la esperanza (como pseudosentimiento) es un sentimiento difícil aunque parezca muy bueno; y como tal puede producir desastres, o en el mejor de los casos no llegar a lo que esperábamos.

Otro de los ejemplos típicos es “la búsqueda de justicia”, el cual parece un super-sentimiento altruista.

¿De dónde puede nacer una “necesidad de justicia”? Pues de una inconformidad, de una indignación y hasta de una rabia; que busca que algo sea resarcido, corregido, penado, etc.

La “necesidad de justicia” no es más que un pseudosentimiento que nace desde los sentimientos reales de inconformidad, indignación y rabia.

Los importantes sentimientos.

¿Pero por qué son importantes los sentimientos verdaderos o reales?

Desde un punto de vista holístico sabemos que cada uno de nosotros condiciona su propia realidad (somos co-creadores de nuestra realidad). Y este condicionamiento responde no solo a nuestras acciones, sino a leyes universales que responden directamente a nuestros sentimientos.

Al igual que el concepto de pseudosentimientos es algo nuevo que debemos comenzar a manejar; hay mitos de la “nueva era” que nacen desde un mal entenimiento de las leyes universales que se conocen desde siempre.

La conocida Ley de Atracción responde a lo que sentimos; no a lo decimos ni a lo que pensamos. Y la misma Ley del Karma, aunque se conozca como “acción y reacción”, responde a los sentimientos que sienten los demás gracias a nosotros. Siempre son los sentimientos.

Si condicionamos nuestra realidad con el pensamiento, pues cualquier “esfuerzo mental”, cualquiera “buena intención”, diera siempre buenos frutos; y sabemos de sobra que no es así.

Cuando se apuntan “éxitos del pensamiento positivo” tendríamos que sincerarnos y contabilizar también los fracasos; las veces que “pensar positivo no ha servido de nada”. Si lo hiciéramos nos diéramos cuenta que los éxitos y los fracasos se enmarcarían solo en un asunto de probabilidades.

Pero si comenzamos a monitorear y controlar nuestros “sentimientos verdaderos”, definitivamente se inclinaría la balanza con mayor acierto. Nos sentimos mal: condicionamos realidades malas; nos sentimos verdaderamente bien: condicionamos realidades buenas. Es ley, no hay letras pequeñas.

Aún la acción sirve

Pero la acción aun es válida; ya no para condicionar nuestro éxito, sino para hacer realidad lo que vaya a suceder.

Recordemos que “en este universo nada se destruye, solo se transforma”; y las cosas que nos suceden no son más que la transformación de la “acción esforzada” que ponemos en conseguirlas.

Así que la acción aun es importante, pero el éxito final estará matizado por nuestros sentimientos.

Namasté
Pedro A. Gómez Ruzzo.
Master Reiki Usui-Tibetano, Karuna Ki, Reiki Mineral
Original: 03 de agosto del 2015.
Twitters: @SanaCristica @eReiki @EvolConsc @pagr777 @AdamaConsc
Palabras-claves: acción, sentimientos, pseudosentimientos, ley de atracción, karma