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jueves, 26 de mayo de 2016

Mentes agotadas - Anexos a los escritos del 2015 y 2016

Autor: Pedro A. Gómez Ruzzo

Este es un anexo a los escritos: "Energías para el 2015" y "2016 - Comienza: El año del Señor"

El Escenario Kármico ha comenzado a agotar a las mentes. Lo problemas cognitivos comenzarán a aparecer cada vez más, debido al agotamiento de la psiquis. La explicación desde la dinámica energética es absolutamente coherente:

  1. El escenario kármico ha venido agotando los “chakras base” que nunca se prepararon para lidiar con el karma.
  2. Un “chakra base” agotado y por lo tanto inestable, genera “estados de alerta” que sobre estimulan al “sexto chakra”.
  3. El sexto chara se agota por la sobrexigencia de las sensaciones del estado de emergencia. Este chakra corresponde a la energía para el manejo de los sentidos y extrasentidos, además de nuestras capacidades cognitivas.
    Nuestra mente simplemente no puede actuar ni resolver en un escenario kármico. Un escenario kármico no tiene ni lógica ni corrección desde lo humano,  es totalmente espiritual y desde allí se tuvo que haber abordado.
  4. El sexto chakra agotado disminuye drásticamente la capacidad humana de lidiar con la realidad.
    Ahora es que se comienzan a ver a "personas viviendo como muertos"; personas cada vez más desconectadas de la realidad, con cada vez menos capacidad de razonar; actuando de forma exagerada, bizarra e incoherente; sin posibilidad de medir las consecuencias de sus acciones; seres vivientes simplemente "viviendo de forma automática, instintiva e incomprensible”; muchas veces pareciendo desquiciadas.
    Las enfermedades mentales, diferentes tipos de demencia, se podrán manifestar de forma acelerada y sorpresiva.

Cada vez es más notoria la pérdida de “humanidad”; la cual que se sostenía desde la argumentación y conveniencia mental. Se pierde la mente se pierde la humanidad.

Ahora sí comienza a ser más evidente lo útil que hubiera sido haber desarrollado un poco de espíritu para utilizarlo en vivir este "escenario kármico".

Si se hubiera abordado la situación con algo de espíritu, el chakra base no se hubiera agotando y se hubiera frenado el aparente “desquiciamiento”.

Tuvimos que haber aprendido a ser más espirituales que humanos. Se nos dio la oportunidad.

Aun faltan cosas por ver.

Namasté.

Pedro A. Gómez Ruzzo.
Master Reiki Usui-Tibetano, Karuna Ki, Reiki Mineral
Original: día 147 A.S. (26mayo2016)
Twitters: @eReiki @pagr777 @EvolConsc @SanaCristica

Palabras-claves  escenario kármico, humanidad, desquiciamiento, mente, agotamiento, mental, 2015, 2016, espíritu, espirituales.

lunes, 23 de mayo de 2016

La Santísima Trinidad

Autor: Pedro A. Gómez Ruzzo

Uno de los conceptos más difíciles de explicar para algunas religiones es el de la Santísima Trinidad. O por lo menos para algunos religiosos.

En realidad no es tan difícil, si se explica desde el contexto real al cual pertenece.

La Santísima Trinidad no es un concepto católico, ni cristiano; y ni siquiera es un concepto religioso. La Santísima Trinidad es la verdad mística de cómo funciona el proceso espiritual del universo. Por lo tanto, es un concepto místico.

Recordemos que lo místico es el sustrato de todas las religiones; ya que en él se explica claramente lo que las religiones luego toman como enseñanza espiritual y la presentan al público.

Puede haber muchas religiones, pero el verdadero misticismo es único y es el mismo para todas ellas. Cuidado con lo que muchas veces se conoce como misticismo en esta desafortunada “Nueva Era”.

Entonces, el hecho de que  el concepto de la Santísima Trinidad sea místico, plantea que todas las religiones tienen su representación de lo mismo.

A los cristianos católicos nos gusta pensar que la Santísima Trinidad es nuestra; es un dogma de fe, por el solo hecho de que no se dan explicaciones.  Pero por ejemplo, los hinduistas tienen el mismo concepto de la Santísima Trinidad, más antiguo y mejor entendido (lamento decirlo). Cuando se llega a entender nos damos cuenta que es exactamente el mismo.

Aquí pretendo presentar este concepto desde ambas religiones; lo he hecho en muchas oportunidades, pero una más, nunca está de más; sobre todo por la importancia que tiene.

Realmente, todo proceso o camino espiritual tiene como basamento la existencia de eso que se conoce como la Santísima Trinidad. Marca cómo se realiza y cómo se debe asumir toda intención de llegar al Cielo, al Nirvana, al Padre, etc.

Intentaré en este escrito decir lo estrictamente necesario y de forma resumida para no confundir.


El Proceso Espiritual del Universo (genérico)

“Dios Padre” creó TODO el UNIVERSO à Esa creación contiene lo burdo temporal y lo espiritual eterno, entremezclado à El proceso implica/necesita que todo vuelva al Padre à Para eso hay que separar “el trigo de la paja”; y para esto hay que romper, mover y destruir (metafóricamente hablando) la realidad burda para que aflore lo espiritual eterno à Pero no solo hay que destruir para evidenciar lo burdo de lo espiritual, sino que se debe recolectar lo espiritual y preservarlo para que pueda ser llevado al Padre de vuelta.

Si este ciclo se llega a entender, se entiende la Santísima Trinidad. Y si lo seguimos de forma apropiada dentro de nuestro camino espiritual, pues tendremos el camino directo para resucitar al lado del Padre.

Los tres nodos “creación, destrucción y recuperador/preservador” se unen en una estructura de triángulo equilátero (con los tres lados iguales) demostrando lo igualmente importante de los tres procesos y lo inseparable de uno con el siguiente formando un ciclo; donde el principio se une con el final, el que fue al comienzo volverá a ser al final, el Alfa y el Omega.


La Santísima Trinidad para el cristianismo católico.

Padre, Hijo y Espíritu Santo. Místicamente es más apropiado decir Padre, Espíritu Santo e Hijo; pero como forman un triángulo perfecto, el cambio de los factores se puede tolerar.

El proceso es muy claro.

-       Se tiene el Padre creador de todo el Universo;
-       Se tiene al Espíritu Santo que vino a poner de cabeza (incluso con destrucción) a todo la terrenalidad burda para aflorar lo espiritual.
-       Se tiene al Hijo (al Cristo) que vino a dar las enseñanzas para precisamente “separar la paja del trigo”, para reconocer lo espiritual y preservarlo y así llegar al Cielo.

Con estos tres actores, lo que más incomodidad plantea es ver al Espíritu Santo como el que promueve la “destrucción de la terrenalidad”.

Pero deberíamos recordar la gestación de Jesús en la Virgen María gracias al Espíritu Santo. El niño que de allí nació, debía ser destruido (en su parte terrenal) para que todo se cumpliera. Así que la destrucción siempre estuvo prense en la misma concepción del Cristo.

Además, que el mismo Cristo como gestación del Espíritu Santo vino a romper esquemas y estructuras humanas que no estaban sostenidas por lo realmente espiritual.

Parte del problema con algunas personas que se dicen cristianas, es que ven a la crucifixión de nuestro Señor como algo desgraciado y que debió haber sido evitado.

Pues les invito a estudiar la Biblia. El mismo Jesucristo advirtió que si Él hubiera querido liberarse de dicho destino, pues lo hubiera podido hacer (Mateo 26:52-54). Pero no fue así, porque su muerte era indispensable para que la voluntad del Padre se cumpliera. Es decir, para que se cerrara el triángulo de la Santísima Trinidad.

No es incorrecto tampoco identificar el proceso de “mover tierra”, de “romper comodidades malsanas” o de “crear consciencia de estar actuando mal espiritualmente hablando” en Juan el Bautista. También él representa la Escencia del Espíritu Santo, preparando el camino a Hijo de Dios.

Si revisamos la historia sagrada judeocristiana, vemos representado totalmente a la Santísima Trinidad en la línea de tiempo. Desde el Génesis (creación de Dios Padre); los profetas (incluyendo a Juan el bautista) removiendo/preparando todo y promoviendo el cambio (Dios Espíritu Santo); y la venida y muerte de Nuestro Señor Jesucristo para rescatar esa parte espiritual que se había evidenciado como perdida (Dios Hijo)

Creación de todo à Purificación de la realidad à Recuperación de lo verdaderamente espiritual para volver al Padre.

Realidad creada dual à Rompimiento para separar lo espiritual de lo burdo à Preservación y resguardo únicamente de lo espiritual.

Todo creado à destrucción para el cambio à renovación para salvación.

Vida mezclada entre tierra y Cielo
à Crisis para permitir distinguir el Cielo de la tierra à selección y adopción de lo espiritual.

Esto es la Santísima Trinidad.


La Santísima Trinidad desde el hinduismo.

Brahma, Vishnú y Shiva. Más apropiado también decir Brahma, Shiva y Vishnu.

En el hinduismo la Santísima Trinidad es conocida como la Trimurti.

 Aquí es mucho más fácil. Cada una de estas tres deidades que conforman la Santísima Trinidad hindú, tienen sus características y funciones muy bien definidas.

-       Se tiene al Señor Brahma - creador de todo;
-       Se tiene al Señor Shiva como el promotor del cambio, destructor de la realidad para poder diferenciar lo burdo de lo espiritual.
-       Se tiene al Señor Vishnú como el recuperador y preservador/conservador de lo espiritual.

Si nos libramos de fanatismos y críticas ciegas a otras religiones y estudiamos lo que significa cada una de estas deidades hindúes encontramos un paralelismo que nos acercaría, en vez de separarnos.

Incluso, para la Santísima Trinidad Católica Cristina se acota que Padre, Hijo y Espíritu Santo forman un único Dios; y se aprende en el hinduismo que Brahma, Vishnú y Shiva son las personalidades del mismo Dios.

Es exactamente el mismo concepto místico de la Santísima Trinidad. Si se comienza a manejar estas tres aristas de nuestro camino espiritual, el camino al Cielo resulta más claro y efectivo.

¿Ven que no era tan difícil?

Namasté.

Pedro A. Gómez Ruzzo.
Master Reiki Usui-Tibetano, Karuna Ki, Reiki Mineral
Original: día 144 A.S. (23mayo2016)
Twitters: @eReiki @pagr777 @EvolConsc @SanaCristica

Palabras-claves  Santísima Trinidad, Padre, Hijo, Espíritu Santo, Brahma, Vishnú, Shiva

Orar y rezar: cómo hacerlo de forma efectiva

Autor: Pedro A. Gómez Ruzzo

Tanto el hacer oración como el rezar entran dentro de la práctica espiritual-religiosa.

Son ejercicios espirituales que obtienen un bonito resultado cuando la persona que la realiza está dedicando buena parte de su vida a su crecimiento espiritual.

Lamentablemente  ambas prácticas suelen ser utilizadas fuera de contexto; cuando simplemente alguien desea algún favor del Cielo. Es similar a que una persona vaya una semana a jugar tenis porque necesita bajar de peso para una fiesta. Luego de la fiesta, haya conseguido o no su objetivo, se olvida del ejercicio.

¿Acaso a esa persona, en ese evento compulsivo, espasmódico y urgido, el ejercicio le sirvió realmente de algo?  Cuando se reza o se ora de manera similar (compulsiva, espasmódica o simplemente urgida)  ¿la oración hace lo que tiene que hacer?

Si quieres creer que sí, me alegro por ti; pero el universo se encargará de enseñarte.

A entender de muchos, el rezar es un proceso repetitivo y monótono de algunas frases, palabras o sonidos preestablecidos, las mismas con connotación Divina; sin que necesariamente esté involucrado el intelecto.

Por el contrario, la acción de orar es más parecida a un diálogo que se plantea con la Divinidad o con algún Ser Santo; más libre y menos automático que la sola repetición de frases prehechas.

Pero salvando esta diferencia notable, ambas tienen una misma razón de ser.

Como son ejercicios prácticos dentro del crecimiento espiritual, lo que se busca con la práctica dedicada y sostenida de ambas acciones, es el afloramiento o manifestación gradual de nuestro espíritu.

Nuestro espíritu entonces, mientras vaya aflorando con la constancia y la perseverancia de la oración o el rezo, es el que debe comenzar a tomar el control de nuestra vida terrenal. Esta es la motivación real de todo crecimiento espiritual.

Así que es de notar que el rezo y la oración no se utilizan únicamente cuando estamos en necesidad de alguna gracia. Si solo lo hacemos es esos momentos, la oración o el rezo se pueden o no quedar sin respuesta, en función de cuánto nos hayamos dedicado a hacerlo aun cuando no teníamos una necesidad particular.

Es como querer ganar un campeonato de tenis practicando solo cuando tenemos una fiesta y queremos perder unos kilos.

“Si quieres que Dios te escuche, no esperes a la necesidad para hablarle y pedirle los favores. Lo más seguro es que entonces Él no se acuerde de ti o tú no te logres explicar bien.” PAGR2016


El requisito de mayor importancia.

Pero aún hay más.

La necesaria práctica continua de orar y rezar para aflorar a nuestro espíritu o también para tener mayor efectividad a la hora de pedir algo, no es lo único que se necesita. Tanto el orar como el rezar tienen un requisito común, importante en todos los casos.

Cuando se ora o se reza, quien debe manifestarse es nuestro espíritu. Y nuestro espíritu, como parte de Dios que es, tiene total confianza en la Divinidad.

Por lo tanto, al orar o al rezar debemos siempre hacerlo con total confianza en Dios; y esa confianza se debe manifestar en un “corazón limpio”. Me explico.

La confianza en Dios nunca es la certeza de que se te va a cumplir lo que pides, eso es “ingenuidad manipuladora”. Cuando se tiene real confianza en Dios, se sabe que Él tiene el control de toda la existencia (por algo es todopoderoso); y que va a suceder lo que Él tenga designado para tu bien mayor (por algo es que todo lo sabe); y que debemos, por lo tanto, confiar en que Él no nos va a abandonar pase lo que pase (por algo está en todas partes). Por esto confiamos en Dios.

Esta es la verdadera actitud de orar o rezar; y la misma lleva al concepto del “corazón limpio” o “corazón inmaculado”.

Cuando la Virgen María, dentro de la fe católica, pide rezar el Santo Rosario, siempre nos recuerda hacerlo con el corazón inmaculado. Por algo será.

Imaginémonos orando o rezando con el corazón lleno de rabia; de ira; de indignación; de miedo; de sed de justicia; etc. Sabemos, por otro lado, que “Dios escucha únicamente los corazones” (1 Samuel 16:7)

Entonces si al comunicarnos con Dios, Él escucha tal suerte de sentimientos en nuestros corazones ¿qué podría decir Él? Lo mínimo es: ¿Qué pasa?; ¿Acaso no me tienes confianza?; ¿No te das cuenta que que te pudo haber ido peor?; ¿Así sientes por tus semejantes?; ¿Por qué anoche me dijiste ´hágase tu voluntad´ y hoy pides lo que tú quieres?; ¿Y lo que YO te mandé sobre amar a tus enemigos dónde quedó?; ¿Y lo de poner la otra mejilla?; y un largo etcétera.

Complicado esto de orar y rezar con el corazón no muy limpio, ¿verdad?

Pero atención: cuidado con el “positivismo estúpido” y el tema de los pseudosentimientos; nosotros mismos seremos los únicos engañados.

Pero aún hay más.


Leyes Universales por delante

Además de la parodia anterior de Dios oyendo lo que sentimos cuando oramos o rezamos, ¿Hay alguna otra razón para cuidar lo que sentimos en el corazón al hacerlo?

Porque más allá de estar mandando las señales equivocadas de confianza a Dios recordemos que durante la práctica de la oración y el rezo, lo que se busca es que el espíritu se manifieste; y para eso debemos calmar nuestra mente (olvidarnos de los problemas) y aquietar nuestros sentimientos (corazón limpio)

Tanto el orar como el rezar son momentos especiales donde nos conectamos con el Universo (con Dios). Y en esos momentos, el Universo no va a corresponder a lo que le decimos desde nuestros pensamientos o palabras, sino que va a tomar lo que sentimos en nuestro corazón y con ellos activar sus Leyes Universales.

Sí. Tanto la Ley de Atracción como la Ley del Karma se activan es con lo que sentimos; de forma personal para la primera, o hacia los demás para la segunda ley.

Así que si durante un momento de oración o de rezo le entregamos al Universo energías difíciles desde nuestro corazón, pues nos estaremos complicando la vida más allá de lo que podamos imaginarnos.

Si al Universo le damos sentimientos difíciles, él no podrá construirnos futuros nada brillantes. De “mal” siempre podemos pasar a “peor”, de forma muy fácil y automática. Pondremos las leyes de Atracción y de Karma en nuestra contra.

Así que hay que ser muy cuidadoso a lo que sentimos al orar o al rezar

Pero ya es suficiente por ahora. Solo debemos recordar que no debemos esperar necesitarlo para comenzar la práctica de orar o rezar; y que cada vez que lo hagamos debemos mantener nuestro corazón limpio. De lo contrario sería muy peligroso.


Namasté.

Pedro A. Gómez Ruzzo.
Master Reiki Usui-Tibetano, Karuna Ki, Reiki Mineral
Original: día 144 A.S. (23mayo2016)
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Palabras-claves  Leyes universales, orar, rezar, corazón, mente, Dios, universo, confianza, Dios, ley de atracción, karma

martes, 17 de mayo de 2016

¿A quién le entregas tu energía?

Autor: Pedro A. Gómez Ruzzo
  
Al ser nuestro crecimiento espiritual un proceso de vida, pues vamos a necesitar energía para que este se lleve a cabo.

Si bien este proceso no es ni simple ni rápido, además que hay que transitarlo con las menores expectativas posibles; muchas veces hacemos esfuerzos tras esfuerzos y pareciera que no vamos ganando nada. En nuestra vida no parece ni asomarse ese estado de paz prometido.

Aquí es donde cabe la pregunta ¿a quién (o a qué) le estás entregando esa energía que deberías estar utilizando para crecer espiritualmente?

Y es que el crecimiento espiritual no necesita de cualquier energía; sino que necesita de nuestra energía del 2do chakra (Swadhistana).

Esta energía tiene diferentes nombres. En diferentes ámbitos se suele conocer como: nuestra energía de discípulo; nuestra energía de esencia femenina (sin alusión al sexo femenino); nuestra energía vital pura; nuestra energía de creación; o nuestra energía de bienestar.

Siempre, siempre; en un proceso de crecimiento espiritual debemos autoevaluarnos (o el maestro espiritual lo puede pedir hacer) en cuanto al uso que le estamos dando  esa energía en nuestro cotidiano vivir. Y la razón es directa: si dicha energía de bienestar la estamos entregando prioritariamente a procesos de vida no espirituales; pues no tendremos energía para crecer espiritualmente a pesar de nuestras nuevas intenciones e incluso nuestro notable esfuerzo.

Pero no es el caso de que estemos haciendo bien o mal; es un asunto de elección personal. Esta elección muchas veces se nombra bajo el tema de “lealtad al crecimiento espiritual”.

No ser “leal” en este caso (quiere decir desviar el uso de la energía de bienestar que podría utilizarse para crecer espiritualmente) no es malo, ni es pecado; simplemente es una elección de querer mantenerse enfocado a la terrenalidad y dejar para otro momento el crecimiento espiritual. Que eso traiga consecuencias personales en el futuro; pues sí, pero ese es otro asunto.

Está bien que entregues tu energía de bienestar a “causas humanas”; pero debes recordar que Dios no podrá sostenerte dicho bienestar; ya que al entregar tu energía a lo terrenal estarás a merced de lo humano. Fue tu decisión.

Pero se tendría que aclarar qué significa "entregar" tu energía de bienestar. A lo mejor lo estás haciendo y no te das cuenta.

"Entregar" significa "dar con preferencia".

Y entregar tu "energía de bienestar" se refiere a cuando tú trabajas de forma entregada por causas humanas; cuando das tu creatividad a causas humanas; cuando confías tu bienestar o felicidad en causas humanas; cuando defiendes con fuerza a causas humanas; cuando adversas, te molestas o te indignas por causas humanas; solo para nombrar algunas generales.

Si es así, te deberás atener a lo que temporalmente te pueda dar o quitar las causas humanas; vivirás con altibajos. En este caso ¿tendrás estabilidad en tu vida? Pues no aplica.

Pero ¿qué son causas humanas?

Toda "causa humana" es aquella con metas y objetivos físicos/terrenales/humanos (económicos/biológicos, mentales y emocionales). Dichas metas son potencialmente perecederas (no eternas), y donde existe lucha/competencia entre partes.

Toda "causa humana" es aquella que no tiene como meta agradar a Dios para así ganarnos la vida eterna.

Algunos ejemplos sencillos de “causas humanas” podrían ser:

  • Una relación de pareja que no se sostenga bajo argumentos de tolerancia, respeto, empatía, consideración hacia el otro, etc.; y donde no exista una visión de la relación como un escenario para llegar juntos a Dios.
  • Un trabajo donde no existan lineamientos mínimos de amor al prójimo (hacia todos; no solo hacia los que piensan como yo)
  • Cualquier tipo de esfuerzo donde la meta sea únicamente el bienestar físico/económico, mental y/o emocional; así sea bienestar personal o grupal.
  • Interacción con otros individuos o grupos de conocidos, amigos, asociaciones, etc.; donde se manejen “causas reactivas” (donde se trabaje en función de luchas contra enemigos o culpables reales o argumentados)

Pero bueno, está bien que entregues tu energía de bienestar a causas humanas; nadie tiene derecho a criticarte. Pero no te engañes creyéndote espiritual.

Peor que no crecer espiritualmente puede ser engañarnos y creer que no estamos haciendo bien. En estos casos, se podría decir que Dios es extremadamente celoso con el proceso

Namasté.

Pedro A. Gómez Ruzzo.
Master Reiki Usui-Tibetano, Karuna Ki, Reiki Mineral
Original: día 137 A.S. (16mayo2016)
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Palabras-claves  crecimiento espiritual, energía vital, bienestar, escencia femenina, Dios, espíritu, swadhistana, segundo, 2do, chakra

lunes, 16 de mayo de 2016

Necesito energía, no puedo más

Autor: Pedro A. Gómez Ruzzo

Me voy a permitir escribir parte de la reflexión que di a una persona que solicitaba se le enviara Reiki para cargarse de energía, ya que estaba agotada por tener tiempo sumergida en una situación complicada de vida.

Y lo quiero dejar público porque no es una reflexión puntual a alguien en particular. Lamentablemente es una constante a la que me enfrento todos los días.

Cuando estamos en una situación agotadora, donde nos desgastamos energéticamente; siempre llega el momento en que sentimos que no podemos más. Esto es totalmente normal y no es criticable.

En esos momentos podremos recibir energía adicional para sentirnos mejor, pero de la misma forma esa energía se gastará, una y otra vez, ante la misma situación. Por supuesto que recibir energía adicional nos ayudará; ¿pero hasta dónde y hasta cuándo?

Lo que desgasta a una persona de una situación difícil, no es la situación misma; sino el cómo se asume. Si solo la abordamos desde nuestra parte humana (física, mental y/o emocional), más pronto que tarde sentiremos que no podemos más. Podremos entonces recargarnos de energía, pero el ciclo se repetirá.

Parte del problema de este ciclo es que uno se va dañando muchas veces de forma irreversible.

Lo que hay que hacer allí, es cambiar la forma en la que vemos la situación; y descubrir que eso que nos sucede también tiene un enfoque espiritual. Entonces, deberemos comenzar a abordarla desde allí, con nuestro espíritu; y no solo con nuestra parte humana frágil.

A diferencia de nuestra parte humana, nuestra parte espiritual no se agota; y gracias a ello, comenzamos a hacer el cambio que en realidad buscamos sin saberlo.

Coloco solo un ejemplo numérico simbólico. Nuestra parte humana es capaz de agotarse 100% (hay personas que pierden la vida de agotamiento); pero nuestra parte espiritual nunca se agota (0%) aunque asuma y se involucre en la situación, porque va más allá del problema terrenal agotador.

Entonces, si abordamos una situación difícil 100% de forma humana, pues tendremos un posible agotamiento del 100%.

Pero si descubrimos, despertamos e involucramos un 30% de nuestra parte espiritual (por ejemplo), con un 70% de nuestra parte humana; pues cuando mucho agotaremos un 70% de nuestras energías. Y cuanto más espíritu, menor agotamiento.

Pero descubrir nuestra parte espiritual y aprender a utilizarla en nuestra vida, es un trabajo arduo que no se hace de la noche a la mañana. El problema suele ser que la buscamos cuando estamos urgidos de alguna solución.

Nuestras religiones pudieran comenzar a hacer el trabajo de ir descubriendo nuestro espíritu; pero deberíamos comenzar deslastrarnos de ese “juicio por ignorancia” de que las religiones son malas o corruptas o satánicas. Las instituciones pueden serlo; la práctica religiosa no lo es.

Un maestro espiritual también pudiera hacer el trabajo, incluso más dedicado,  de enseñarte a vivir desde tu espíritu. Pero también existen factores en contra: la soberbia personal, la creencia de que "yo puedo lograrlo solo"; la costumbre de que "si no lo entiendo no lo hago"; el desconocimiento de lo que significa realmente el término espiritual; o la triste expectativa de buscar "resultados rápidos y evidentes", entre otros factores.

Estos factores echan por tierra un escenario espiritual guiados por un maestro espiritual verdadero.

Pero cuidado; espiritual no es: ni lecturas de cartas, ni astros, ni adivinaciones del futuro, ni rituales, ni piedras, ni energías, ni baños, ni seres del más allá, ni aromas, ni inciensos, ni mensajes celestiales,  etc.

Antes de aceptar o proceder con lo dicho en estas líneas, recuerda que lo espiritual implica refinar o fortalecer tu relación directa y comprometida con Dios. Un ser espiritual no busca solo estar de buenas con Dios, sino que se esfuerza para que Dios esté de buenas con él.

Y así seguiré recibiendo todos los días solicitudes de envío de energía, donde lo que se necesitaría es cambiar el enfoque de vida.

Igual seguiré enviando, pero junto a esta misma reflexión.

Namasté

Pedro A. Gómez Ruzzo.
Master Reiki Usui-Tibetano, Karuna Ki, Reiki Mineral
Original: día 137 A.S. (16mayo2016)
Twitters: @eReiki @pagr777 @EvolConsc @SanaCristica

Palabras-claves  espíritu, Reiki, situaciones complicadas, religiones, maestro espiritual, ser espiritual, energía, rituales, 

viernes, 13 de mayo de 2016

Virgen de Fátima – Parte 1

Autor: Pedro A. Gómez Ruzzo

Todos los mensajes marianos que se dan en las apariciones de la Virgen María, tienen un contexto netamente espiritual; de enseñanza.

Es triste cuando se tratan de interpretar estos mensajes como si fueran profecías de hechos concretos que se espera que ocurran dentro la historia por venir. La Virgen María pareciera más un “reportero del futuro”, una “Nostradamus”, que la Madre del Cielo que aboga porque  las enseñanzas de su Hijo sean respetadas.

Si nos quedamos esperando que las “supuestas profecías” se cumplan, perdemos las enseñanzas y las oportunidades de enmendar, cayendo en desgracias a pesar de las llamadas de atención que nos fueron dadas. Esto es exactamente es lo que ha pasado con los mensajes marianos y la civilización actual.

En esta serie de escritos que voy a ir liberando me permitiré dar la enseñanza mística de los mensajes de Fátima (haré lo mismo en algún momento con la Virgen de Medjugorje).

Vale la pena recordar, que si bien la enseñanza mística no es acepta por muchos, esta nunca contradice a la enseñanza  eclesiástica; aunque sí puede darle un contexto más amplio que cabe en todas las religiones (aunque incomode a algunas).

La enseñanza mística es una sola, común a todas las iglesias y religiones; pero es cierto que cada religión puede tener su propia contextualización de las enseñanzas y esa es la que dan como enseñanza eclesiástica.

Me apoyaré con un resumen de la historia de las apariciones de Fátima realizado por Karina DS, e iremos paso a paso; diciendo lo que puede ser dicho en público.

Comencemos:

La historia de la Virgen de Fátima comienza en el año de 1916 en la Cova de Iria cerca de la aldea de Fátima en Portugal mientras tres niños, Lucía (9 años), Francisco (8 años) y Jacinta (6 años) realizan sus actividades como pastores, juegan y rezan. Un Ángel se le aparece a los niños 3 veces en el transcurso del año 1.916

- Primera aparición del Ángel (en Cova de Iria):
Dijo: "No teman yo soy el Ángel de la Paz, recen conmigo” (1era)                     
Luego, se arrodilló doblando su rostro hasta el suelo (los niños hicieron lo mismo)
Dijo: “Mi Dios, yo creo en ti, yo te adoro, yo te espero y yo te amo. Te pido perdón por los que no creen, no te adoran, no te esperan y no te aman”
Después de repetir esta oración tres veces el ángel se incorporó.
Dijo: “Orad de esta forma. Los corazones de Jesús y María están listos para escucharos” y desapareció.

- Segunda aparición del Ángel:
En el verano de 1916, los niños estaban jugando detrás de la casa de Lucía. De pronto, apareció el Ángel…
Dijo: ¿Qué están haciendo? ¡Tenéis que rezar! ¡Rezar! Los corazones de Jesús y María tienen designios Misericordiosos para vosotros. Debéis ofrecer vuestras oraciones y sacrificios a Dios, el Altísimo
Preguntó Lucía: "¿Pero cómo  debemos sacrificarnos?"
Dijo: "En todo lo que hagan ofrezcan un sacrificio a Dios para pagar por los pecados que le ofenden, de esta forma vosotros traeréis la paz a este país, ya que yo soy su ángel guardián, el Ángel de Portugal. Sobre todo, acepten con sumisión los sufrimientos que Dios les va a mandar." (2da)

- Tercera aparición del Ángel:
Al final del verano, el Ángel se apareció mientras los niños estaban rezando. En su mano sostenía un Cáliz y sobre él, una Hostia sangrando.
Dijo: "Oh Santísima Trinidad, Padre, Hijo y Espíritu Santo, Os adoro y ofrezco el precioso cuerpo, sangre, alma y Divinidad de Nuestro Señor Jesucristo, presente en todos los tabernáculos del mundo, en reparación por las ingratitudes, sacrilegios e indiferencias por los cuales Él es ofendido. Y por los méritos infinitos de Su Sagrado Corazón y del Inmaculado Corazón de María, Os imploro por la conversión de los pobres pecadores."
Luego, dando la Hostia a Lucía y el contenido del Cáliz a Francisco y a Jacinta   Dijo: "Tomad y bebed del Cuerpo y Sangre de Jesucristo, Terriblemente ofendido por la ingratitud de los hombres. Ofreced reparación por ellos y consolad a Dios." (2da)
Una vez más él se inclinó al suelo repitiendo con nosotros la misma oración tres veces: Oh Santísima Trinidad… y desapareció.


Primera enseñanza:

Es notorio, incluso en la Santa Biblia, que cada hecho importante siempre es presentado por una figura angelical, es decir, por un Mensajero de Dios.

En Fátima, el ángel se presenta tres veces, previas a la aparición mariana. Y ese mismo protagonismo de los ángeles lo vemos a lo largo de la historia sagrada cristiana. Algunos de estos hechos los vemos en: la Anunciación del nacimiento de Juan el Bautista; la Anunciación a la Virgen María; los ángeles anunciando a los pastores, el ángel advirtiendo a José de huir a Egipto, Jesús en la trasfiguración; los ángeles en el sepulcro al domingo de Gloria, entre otras.

Esto nos debería enseñar que nuestro cristianismo va más allá de Jesús y María, por supuesto sin quitarles la Suprema importancia que estas dos figuras tienen.

Toda la historia cristiana siempre ha parecido orquestada por esos seres Mensajeros de Dios; que más allá de solo dar mensajes, mueves sus hilos para que la Voluntad de Dios Padres sea hecha. ¿O es que acaso no están para eso?

Segunda enseñanza:

Tanto en la 2da como en la 3era visita del ángel en Fátima, es notorio la petición del mismo ángel hacia los tres niños pueblerinos inocentes, para que hagan sacrificios personales y con ello intercedan ante los pecados y las ofensas de los hombres hacia Dios; e incluso “que acepten con sumisión los sufrimientos que Dios les va a mandar” para así traer paz a su país.

Generalmente los católicos no nos preguntamos más de lo que no sepamos explicar y preferimos pasarlo por algo o aceptarlo como dogma de fe. Pero en este caso valdría la pena una reflexión adicional.

¿Cómo un ángel de Dios les va a pedir a tres niños inocentes (por muy santos que sean) que  aguanten los sufrimientos que Dios les va a mandar para consolar a Dios de la ingratitud de los hombres?

Eso tiene un solo nombre y es una realidad cristiana, aunque a algunos católicos no les guste. Ese proceso por el cual seres puros puedan ayudar a limpiar las ofensas a Dios que hace otros, se llama “limpieza kármica”. Es un proceso totalmente cierto; la petición del ángel es totalmente coherente; el ángel no inventaba nada; pero la única forma de entenderlo es conociendo con suficiente profundidad la ley del Karma (o ley de Acción y Reacción).

Se tendría que hablar sobre karma, lazos kármicos, karma grupal, herencia kármica, karma positivo y karma negativo, limpieza kármica; y la invitación del ángel a los tres niños queda totalmente esclarecida.

No lo voy a explicar aquí porque ya son muchos escritos hechos a profundidad. Lo dejo a la responsabilidad del lector que busque entre mis otros escritos y lea sobre el tema si gusta. Pero solo dejo como reflexión que tanto Francisco como Jacinta murieron poco tiempo después debido a una peste. Coherencia kármica absoluta.

Hoy, nuestra Iglesia Católica está comenzando a aceptar reformas sobre estamentos que nunca debieron existir. Específicamente se está reconsiderando ampliar la participación de la mujer y los divorciados en algunos sacramentos de la iglesia. Esto es afortunado.

Pero espero con ansias el día (o el siglo) donde el católico recupere la noción de “la consecuencia ineludible de nuestros actos contra Dios”; y en función a eso tengamos temor a fallarle al Creador haciendo sentir mal a nuestros semejantes. Esto no es más que la “Ley del Karma”.


Continuemos con la aparición de la Virgen de Fátima

-       Primera aparición de la Virgen: El trece de Mayo de 1917
Los tres niños llevaron su rebaño a Cova da Iria en la mañana del 13 de mayo, día de la fiesta de Nuestra Señora del Santísimo Sacramento.
Jugaron en la pradera y después de haber tomado su almuerzo alrededor del mediodía decidieron rezar el rosario, aunque de una manera un poco truncada, diciendo solo las primeras palabras de cada oración.
Al instante, ellos fueron sobresaltados por lo que después describieron como un "rayo en medio de un cielo azul".
Pensando que una tormenta se acercaba se debatían si debían tomar las ovejas e irse a casa. Preparándose para hacerlo fueron nuevamente sorprendidos por una luz extraña.
“Comenzamos a ir cuesta abajo llevando a las ovejas hacia el camino. Cuando estábamos en la mitad de la cuesta, cerca de un árbol de roble (el gran árbol que hoy en día está rodeado de una reja de hierro), vimos otro rayo y después de dar unos cuantos pasos más, vimos en un árbol de roble (uno más pequeño más abajo en la colina) a una señora vestida de blanco, que brillaba más fuerte que el sol, irradiando unos rallos de luz clara e intensa, como una copa de cristal llena de pura agua cuando el sol radiante pasa por ella. Nos detuvimos asombrados. (5ta)
Estábamos tan cerca que quedamos en la luz que la rodeaba, o que ella irradiaba, casi a un metro y medio” (5ta)
Dijo: Por favor no teman, no les voy a hacer daño.
Lucía respondió por parte de los tres, como lo hizo durante todas las apariciones
¿De dónde eres?
Dijo: Yo vengo del cielo.
La Señora vestía con un manto puramente blanco, con un borde de oro que caía hasta sus pies. En sus manos llevaba las cuentas del rosario que parecían estrellas, con un crucifijo radiante. Quieta, Lucía no tenía miedo. La presencia de la Señora le producía solo felicidad y un gozo confiado.
"¿Qué quieres de mí?", dijo Lucía
Dijo: Quiero que regreses aquí los días trece de cada mes por los próximos seis meses a la misma hora. Luego te diré quién soy y qué es lo que más deseo. Y también volveré aquí una séptima vez.
"¿Y yo iré al cielo?", preguntó Lucía. (3ra) (6ta)
Dijo: Sí, tú irás al cielo.
"¿Y Jacinta?"
Dijo: Ella también irá
"¿Y Francisco?"
Dijo: Él también, amor mío; pero primero debe decir muchos Rosarios. (6ta)
La Señora miró a Francisco con compasión por unos minutos, matizado con una pequeña tristeza. Lucía después se acordó de algunos amigos que habían fallecido.
"¿Y María Neves está en el cielo?, continuó Lucía.
Dijo: Si, ella está en el cielo
"¿y Amelia?"
Dijo: Ella está en el purgatorio. (6ta)
El niño, Francisco, nunca pudo escuchar a la Virgen, solo podía verla. Era su hermana Jacinta y su prima Lucía quienes le contaban lo que decía la Virgen. (5ta)
Dijo: ¿Se ofrecerán (ustedes) a Dios y tomarán todos los sufrimientos que Él les envíe? ¿En reparación por todos los pecados que Le ofenden y por la conversión de los pecadores? (3ra) (4ta)
"Oh Sí, lo haremos", respondió Lucía
Dijo: Tendrán que sufrir mucho, pero la gracia de Dios estará con ustedes y los fortalecerá.(4ta)
Lucía relata que mientras la Señora pronunciaba estas palabras, abría sus manos, y…
“Fuimos bañados por una luz celestial que parecía venir directamente de sus manos. La realidad de esta luz penetró nuestros corazones y nuestras almas y sabíamos que de alguna forma esta luz era Dios y podíamos vernos abrazados por ella. (5ta)
Por un impulso interior de gracias caímos de rodillas, repitiendo en nuestros corazones: "Oh Santísima Trinidad, te adoramos. Mi Dios, mi Dios, te amo en el Santísimo Sacramento"
Los niños permanecían de rodillas en el torrente de esta luz maravillosa, hasta que la Señora habló de nuevo, mencionando la guerra en Europa, de la que tenían poca o ninguna noción.
Dijo: Digan el Rosario todos los días, para traer la paz al mundo y el final de la guerra. (7ma)
Después de esto ella se comenzó a elevar lentamente hacia el este, hasta que desapareció en la inmensa distancia. La luz que la rodeaba parecía que se adentraba entre las estrellas, es por eso por lo que a veces decíamos que vimos a los cielos abrirse.

Tercera enseñanza

En esta primera aparición de la Virgen de Fátima a los pastorcitos, tal vez la enseñanza más importante es la caracterización de esos niños merecedores de las apariciones.

-       Primero: el hecho de la inocencia de los niños (sin malicia, ni resentimientos, ni soberbia).
-       Segundo: la devoción pura por el Santo Rosario como compromiso espiritual (sin expectativas ni deseos de solucionar ningún asunto terrenal). Esta devoción a la práctica la cumplían a pesar de sus ganas humanas inocentes de aprovechar el tiempo para jugar.
-       Tercero: la aceptación voluntaria de esos niños de ofrecerse a Dios (ofrecer a Dios su esfuerzo personal de vida) y aceptar todo el sufrimiento que Dios les mande para expiación de los pecados de los demás.
-       Cuarto: el “llegar al Cielo” como único interés en la vida; mostrado en el hecho de que fue la única intención de pregunta que tenían. Pudiendo haberle preguntado algo más, era lo que más les interesaba.

Es esta calidad de seres (en este caso niños, pero bien pudiera ser adultos que cumplan con las mismas características) los que realmente pueden recibir los mensajes marianos reales y puros: seres sin malicia, ni resentimientos, ni soberbia; ganados a comprometer su vida con Dios; y con un compromiso de devoción con la virgen más allá de buscar solucionar sus problemas o los de su comunidad; con un sentido de trascendencia (espiritual) prioritario en su vida.

Cualquier otro mensaje trasmitido por una persona que con cumpla con estas características es de dudosa procedencia.


Cuarta enseñanza

Dios es quien envía los sufrimientos, con la esperanza de que las personas que crean en la Virgen, los tomes, los acepten, los trabajen para que puedan suceder cosas grandes en el mundo, como la reparación de los pecados y la conversión de los pecadores.

En nuestra sociedad, aunque se dice muy mariana, se huye del dolor, se le teme y se le considera algo enviado por el mismo demonio. El sufrimiento se considera un castigo; cuando en realidad es algo en el cual Dios mismo espera que nos fortalezcamos.

Estas son enseñanzas directas de la Virgen.


Quita enseñanza

Las apariciones o visiones marianas son fenómenos extrasensoriales, no son fenómenos sensoriales/físicos.

Esto se muestra en las descripciones extravagantemente sensoriales de dichas visiones, que siempre sucede como interpretación de la mente consciente a estímulos que ella no puede interpretar directamente (estímulos extrasensoriales)

Dicha interpretación siempre se hace de forma personal; pero cuando e comparte la visión solo permanecen los detalles que se pueden correlacionar entre los espectadores.

De igual forma, dicha interpretación personal no solo es en las imágenes, sino que también es en función de los sentidos físicos que se involucran. Cuando se percibe una sensación extrasensorial; algunas personas las interpretarán con imágenes visuales, otras auditivas, otras táctiles, otras olfativas; dependiendo sus características personales. Esto a pesar de ser una misma experiencia extrasensoria.

De aquí que Francisco podría “verla”, pero no escucharla. Si la aparición de la Virgen hubiera sido un fenómeno físico/sensorial; Francisco, quien no tenía limitaciones en la audición, no hubiera tenido problemas para escucharla.


Sexta enseñanza

Existe el Cielo y el Purgatorio; y el Cielo se gana con mucho esfuerzo personal.

El Cielo no está ganado ni automáticos, ni con rutinas convenientes ni sociales; sino con mucho esfuerzo personal.

La Virgen lo ejemplifica hacia Francisco con “rezar muchos rosarios”; de lo cual se debe entender el trasfondo para un niño y extrapolarlo a los adultos.

Para un niño, “rezar muchos rosarios” puede significar dejar de utilizar todo su tiempo libre para “jugar y disfrutar a sus anchas”. Significa dejar de creer que esta vida es para “disfrutarla y pasarla bien” y dedicarle “más del tiempo que a él mismo le gustaría” (eso significa “muchos”) a una actividad de recogimiento y compromiso directamente con Dios (no entra ayudar los demás), que a lo mejor no entiende, que no disfruta humanamente; pero que acepta con compromiso.

Adultos, extrapolen.


Séptima enseñanza

La importancia del Santo Rosario es grande; fue mandado por la misma Virgen como forma de llegar al Cielo, pero previas consideraciones particulares.

La Virgen de Fátima les pide a esos tres niños con características especiales (ver la Tercera enseñanza) que recen el Santo Rosario todos los días.

La Virgen le manda a los tres niños a rezar el Santo Rosario para “traer la paz al mundo y el final de la guerra.”

En esta enseñanza entra la definición de guerra; pero en la misma narración de los hechos se apunta que los niños tenían poca o ninguna noción de la guerra. Por lo tanto, la relación con lo que ocurría en el mundo en aquel momento de la historia puede ser una interpretación “de personal adultas” luego de escuchar el mensaje.

Cuando se habla de guerra, la enseñanza de la Virgen apunta más hacia conflictos entre hermanos, entre semejantes, entre prójimos; con lo cual se imposibilita para ellos la entrada al Cielo.

Pero esta guerra referida no hace alusión a un hecho histórico; con lo cual se perdería la enseñanza espiritual una vez expirado el hecho. La Virgen se refiere a cualquier “guerra o enfrentamiento” entre hermanos que se puede dar en una familia, en un grupo, en una sociedad, en un país o efectivamente entre países.

Entonces, el Santo Rosario rezado diariamente por personas sin malicia, ni resentimientos, ni soberbia (con corazones limpios); ganados a comprometer su vida con Dios; y con un compromiso de devoción con la Virgen más allá de buscar solucionar sus problemas puntuales; ayudaría a resolver conflictos personales y/o mundiales, presente y futuros.


Confío en Dios, que está vez el Mensaje que Nuestra Señora la Virgen María dio en Fátima sea bien comprendido y así aceptado y seguido, para que más almas se puedan salvar para Gloria de Nuestro Señor Jesucristo. Amén. (PAGR)


Esperemos pronto las próximas interpretaciones sobre la aparición de la Virgen de Fátima.

Dios te bendiga.

Pedro A. Gómez Ruzzo.
Master Reiki Usui-Tibetano, Karuna Ki, Reiki Mineral
Original: día 134 A.S. (13mayo2016)
Ampliado : día 136 A.S. (15mayo2016)
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Palabras-claves  Virgen de Fátima, ángel, karma, sacrificio, mística, misticismo, místico, enseñanzas,